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El conflicto por Kosovo se trasladó ayer al campo de juego. El partido entre Serbia y Albania por el Grupo I de la eliminatoria de la Eurocopa 2016 fue suspendido por incidentes dentro y fuera del terreno de juego en el estadio del Partizán Belgrado.
El árbitro inglés Martin Atkinson tuvo que suspender provisoriamente el partido, que estaba 0-0, a los 41 minutos de juego cuando el futbolista serbio Stefan Mitrovic agarró una bandera que volaba sobre el campo de juego enganchada a un drone que tenía impresa la frase "Kosovo libre" y una imagen de un mapa de Albania agrandado para incluir territorios de sus países limítrofes.
A raíz de ese gesto los jugadores del conjunto de Albania le arrebataron la bandera de las manos a Mitrovic provocando una escaramuza entre los futbolistas. Instantáneamente hinchas serbios ingresaron a la cancha para participar de la pelea, inclusive un aficionado serbio golpeó con una silla al delantero visitante Bekim Balaj. Como medida provisoria y tratando de evitar incidentes, se había prohíbido previamente a los hinchas de Albania viajar a Belgrado.
Al inicio del partido, el himno de Albania había sido abucheado por los hinchas locales y además se escucharon cánticos insultantes durante todo el primer tiempo. El referí inglés Atkinson tuvo que parar el juego en más de una ocasión puesto que los espectadores lanzaban bengalas a la cancha.
El titular de la FIFA, Joseph Blatter, criticó el episodio vivido ayer en Belgrado a través de su cuenta personal de Twitter: "Nunca se debe utilizar el fútbol para mensajes políticos. Condeno fuertemente lo que sucedió anoche en Belgrado".
Tras el incidente las autoridades serbias anunciaron hoy que llevarían a cabo una investigación para determinar quién era el que manejó la aeronave por control remoto. La prensa y autoridades en Belgrado acusaron al hermano del primer ministro de Albania, Olsi Rama, de controlar el drone desde un palco VIP en el estadio, aunque él lo negó en diálogo con AP.
Los futbolistas albaneses regresaron hoy a su país, donde fueron recibidos como héroes nacionales.
Ambos países viven tensiones políticas desde hace décadas debido a la provincia de Kosovo. Esa región tiene una mayoría étnica albanesa y declaró su independencia en el año 2008, aunque Serbia defiende que Kosovo le pertenece porque considera que ahí nació su historia de identidad nacional, por la que nunca reconoció su independencia.
No es el primer incidente que protagonizan hinchas serbios, de hecho, fue una pelea entre fanáticos croatas y serbios en Zagreb en el año 1990 lo que marcó el inicio de la desintegración de Yugoslavia de esa década. Otro episodio violento se produjo en octubre de 2010, cuando el partido entre Italia y Serbia por las eliminatorias de la Euro de Génova tuvo que ser interrumpido por culpa de los fanáticos serbios.
Fuente: AFP y AP
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