martes 16 de abril del 2024

Central ganó sobre la hora y tiene puntaje perfecto

En la última jugada, Marco Ruben le dio la victoria al Canalla sobre Tigre por 2-1. En el segundo tiempo pasó de todo: tres goles, dos expulsados en el Matador y fue agredido Gustavo Alfaro.

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Rosario Central acertó el tiro del final, logró doblegar a Tigre por 2-1 en un partido accidentado y con este triunfo sigue como uno de los líderes del campeonato de la Primera División.

Con más ganas que fútbol y aprovechando los dos hombres de más con los que terminó el encuentro, el conjunto que orienta Eduardo Coudet dio vuelta una historia que había tenido un comienzo desfavorable.

Porque fue Tigre el que se puso en ventaja a los 28 minutos de la segunda parte gracias a un gol en contra del colombiano Yeimar Gómez Andrade.

Pero el conjunto canalla reaccionó enseguida y en la jugada siguiente equilibró el marcador por intermedio de Franco Niell. Y luego, cuando su adversario se quedó con 9 por las expulsiones de Marcelo Larrondo y Leandro González Pírez, inclinó la cancha hacia el arco de Javier García.

El gol de Marco Ruben, a nada del cierre y en posición adelantada, le dio el triunfo a Central, que no jugó bien, pero sumó de a tres ante un rival al que se le escapó en el cierre un punto que merecía.

Vale resaltar que a los 15 minutos de la parte final, el director técnico de Tigre, Gustavo Alfaro, fue agredido con un proyectil lanzado desde la platea y el partido estuvo suspendido ocho minutos hasta que el entrenador se recuperó. Durante la primera media hora los dos se excedieron con los pelotazos largos que pocas veces llegaron a destino. El local fue muy vertical y acelerado, y le costó crear situaciones frente al arco de García.

Tigre se sentía cómodo y cortaba el juego con una marca férrea y, a diferencia del local, le servía jugar al pelotazo y con esa receta generó dos situaciones claras.

La primera tuvo como protagonista a Marcelo Larrondo, quien a los 2 minutos ganó por izquierda y sacó un centro que superó a Mauricio Caranta, pero fue despejado por Alejandro Donatti. A los 17, Lucas Janson recibió un pelotazo profundo dentro del área y le ganó la posición a Damián Musto, pero su remate se fue por arriba del travesaño.

Central recién tuvo su primera chance a los 33 minutos cuando Franco Cervi habilitó a César Delgado, quien sacó un centro pasado para José Luis Fernández, quien se apresuró y remató alto.

A 7 del final tuvo otra chance Tigre a través de Larrondo, quien capitalizó un error de Musto y Yeirmar Gómez Andrade, pero perdió en el mano a mano con Caranta.

Y en la última acción de la etapa volvió a estar muy cerca Central. Fernando Barrientos habilitó a Ruben, quien sacó un centro atrás para Fernandez, pero desde inmejorable posición remató por arriba del travesaño.

Tigre jugaba mejor en el inicio de la segunda mitad cuando el partido fue suspendido durante ocho minutos, debido a que desde una platea lanzaron un proyectil que impactó en la cabeza de Alfaro.

"No vamos a parar el partido por un boludo", señaló el técnico cuando se recuperó y el partido se reanudó y se hizo de ida y vuelta. El local estuvo cerca de abrir el marcador tras una jugada por derecha de Cervi que terminó neutralizando la defensa azulgrana.

Pero el que pegó primero fue Tigre. Lucas Wílchez desairó rivales por izquierda, cambió de frente para el recién ingresado Kevin Itabel, quien sacó un centro que, en acción desafortunada, Gómez Andrade empujó hacia su propio arco.

Pero Central se recuperó en la jugada siguiente con un gol de Niell.

La expulsión de Larrondo, por darle un codazo a Barrientos, terminó de inclinar la balanza para Central, que de ahí en más fue el dominador del encuentro.

Pero Central no tenía ideas y le costaba llegar. Hasta que, antes de que arranquen los 14 minutos de descuento, también vio la roja González Pirez, por doble amarilla.

A partir de entonces fue un monólogo canalla. Lo tuvo Colman con una "tijera" que se fue apenas por arriba del travesaño.

Y cuando parecía que Tigre resistía, apareció Ruben, en posición adelantada, para decretar un triunfo que no pareció justo. Así es el fútbol.

Fuente: DyN