martes 16 de abril del 2024

El pasado de Bauza en la Selección argentina

El flamante entrenador de la Albiceleste sufrió un duro golpe cuando le comunicaron que no iría al Mundial de España 1982 y fue subcampeón en Italia 1990. Sus pergaminos.

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El entrenador Edgardo Bauza asumirá al frente de un seleccionado argentino, por el que tuvo un sinuoso paso como futbolista, como haber concentrado cinco meses y quedar fuera de España 1982 y haber sido subcampeón en Italia 1990 sin jugar un solo minuto.

Bauza tiene 58 años y un premio de FIFA por haber estado en el podio de los defensores que más goles oficiales hizo: nada menos que 108, detrás del holandés Ronald Koeman y del Daniel Passarella, aunque luego el español Fernando Hierro lo pasó por dos goles.

El Patón, un apodo que heredó de su hermano mayor, tuvo que cumplir la exigencia de su madre de ir a la escuela a cambio de jugar, primero en el Alumni de su Granadero Baigorria natal y a los 13 a Rosario Central. Acordó ir a la escuela técnica nocturna y aportar con la ayuda del tío carpintero, Adelqui, quien le pagaba para lijar puertas y ventanas.

Pero, al compás del fútbol y mientras hacía goles con su patada de mula desde fuera del área o con cabezazos desde las alturas, también aportó a la militancia socialista en su pueblo y se presentó como candidato a concejal.

Ya habían llegado los primeros títulos con Central, desde que Carlos Timoteo Griguol lo puso en Primera y luego Angel Tulio Zof lo sedujo con su forma de ser.

Los dos viejos maestros formaron la alquimia que lo llevaron a ser entrenador luego de su trayectoria como jugador.

En ese lapso jugó tres partidos con el seleccionado, uno en 1981 y perdió ante Polonia 2-1, y los dos siguientes nueve años después ante México y Escocia, los dos terminados en derrotas 2-0 y 1-0.

Fue César Menotti, luego de una extensa concentración de meses, el que le anunció que quedaba fuera del Mundial de España 82, el golpe más duro que recibió, según admitió en las 100 preguntas que en 2011 le hizo la revista El Gráfico.

Tuvo revancha a medias en el Italia '90 al haber sido subcampeón mundial sin que Carlos Bilardo lo pusiera un solo minuto.

Llegó el tiempo de que como entrenador logre las victorias que como jugador se le negaron.

Fuente: DyN