martes 23 de abril del 2024

Los Gladiadores cayeron en el debut ante Dinamarca

La selección argentina de handball hizo un gran papel ante una de las potencias pero no alcanzó para la hazaña. Fue 25-19 para los europeos.

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Nadie dijo que sería sencillo el camino de Los Gladiadores en su aventura por los Juegos Olímpicos de Río 2016. Su primera parada fue una Dinamarca que no le perdonó los diez minutos de desatención en el inicio del complemento y lo derrotó 25-19 en un partido con más distancia de lo que hubo a lo largo del partido. El clima fue picante en la tribuna, donde los brasileños fueron unos daneses más.

Si alguien le preguntaba en la previa a Dady Gallardo cómo quería que jugase su equipo, la respuesta hubiese sido como en el primer tiempo. El 10-10 con el que terminaron los 30 minutos iniciales fueron un fiel reflejo de un equipo que supo lo que hacía en defensa (como en casi todo el partido) y que aprovechó las dificultades danesas para tomar a un Gonzalo Carou que no paró de generar penales y exclusiones. Tan comprometido se vio el juego de los europeos que su entrenador a pedir minuto a los 10 minutos, con el 2-5 en el marcador en favor de los Gladiadores. Después llegaron los goles de Hansen, uno de los mejores del mundo, y la historia empezó a cambiar.

Pero todo lo que había construido en ese primer tiempo se derrumbó en 5 pésimos minutos del arranque de la segunda mitad. Ahí Dinamarca ajustó en defensa (sobre todo la marca a Carou) y empezó a correr para sacar una luz de cinco goles de ventaja que no iba a poder descontar el conjunto argentino. La falta de variantes en ataque y la gran actuación del arquero Landin terminaron la historia. Ahora queda mirar hacia adelante. El martes ante Croacia el equipo argentino se jugará mucho más que un partido. Debe buscar el triunfo para soñar con los octavos de final.

Párrafo aparte para la hinchada brasileña, que más allá del folclore característico ante los argentinos que estaban en la cancha, hizo sentir que eran muy locales. Primero fue el "Dinamarca, Dinamarca", después el "pentacampeâooooo, pentacampeâooooo", para terminar con el "Chileee, Chileee", en obvia razón a las derrotas en las finales de las últimas dos Copa América.