Entre bailes de samba y videos de Snapchat, la máxima estrella del atletismo mundial, Usain Bolt, anunció que Río 2016 serán los últimos Juegos Olímpicos de su carrera.
En un salón inmenso de la llamada Ciudad de las Artes, en el corazón de Barra da Tijuca, el astro de 29 años dio una noticia triste para el deporte pero con su habitual condimento de diversión, chispa y encanto.
"Estos serán mis últimos Juegos Olímpicos. Sé que mucha gente no estará feliz pero serán los últimos, estoy seguro. Lo he pensado mucho tiempo y creo es el momento de hacerlo", afirmó el atleta en su primera respuesta de la rueda de prensa organizada por la marca deportiva que lo patrocina.
Unos segundos antes, en su aparición, el velocista ya le había dado paso al showman: "Antes que nada, ese aplauso que me dieron tenía que ser más fuerte. Anunciaron: 'Usain Bolt', y ustedes... como si nada pasara", bromeó, mientras imitaba con sus manos un aplauso tímido y con desgano.
Aún cuando Río 2016 ya lleva tres días de competición, cuando hay medallas en juego y cuando se disputan decenas de deportes, la mera figura del corredor jamaiquino fue suficiente como para convocar a más de 400 periodistas de todo el mundo.
Bolt se sentía en su mundo, su hábitat. La aventura olímpica, la cuarta de su historia, suponía el escenario perfecto para hacer brillar al atleta y al animador.
"El atletismo es mi vida y competir es lo que más me gusta hacer", reveló. "Cuando uno es chico, siempre sueña con eventos como este. Yo amo competir, es lo único que me importa y me preparo cada día para eso. Competir es lo que me gusta y yo disfruto ganando", añadió el plusmarquista mundial de los 100 y 200 metros.
Bolt reconoció que en los cinco días que lleva en Río de Janeiro prácticamente no salió de la habitación, pero sí tuvo tiempo para sentir el calor de los brasileños: "El único problema que me surgió fue que tuve que comprar una TV para el departamento en el que estamos. Lo hice por mis colegas, así de buen compañero soy", bromeó.
Entre sonrisas y un desopilante video de la red de Snapchat, en el que el atleta retrató a un periodista noruego que le dedicó un rap con letra propia, el velocista dejó una luz de esperanza para el show que también dará en la pista de atletismo, cuyas prueba empiezan el viernes.
Siempre atento a los legados en las citas de gran magnitud, Bolt anhela que Río 2016 se conviertan en los Juegos donde haya corrido los 200 metros con una marca inferior a los 19 segundos.
Para eso, deberá bajar los 19,19 segundos que él mismo consiguió en Berlín 2009 y que todavía se mantiene como la marca más veloz de la especialidad.
"Definitivamente quiero eso, bajar de los 19 segundos. Va a ser una meta muy difícil porque me perdí tres semanas de entrenamiento, pero es el principal objetivo que tengo en mente", dijo el atleta.
Bolt buscará en Río 2016 la séptima medalla de oro de su carrera. Tanto en Pekín 2008 como en Londres 2012 ganó las competiciones de 100, 200 y 4x100 metros.
Y entre preguntas, sonrisas y la pose de su celebración para los fotógrafos, el cierre del encuentro se produjo con la mezcla ideal de la fiesta brasileña y su espíritu jocoso: un baile de samba junto a mujeres locales, vestidas como si se hubieran escapado del sambódromo de Río en medio del carnaval.
Bolt demostró su habilidad para seguir los pasos y hasta se retiró de la sala al ritmo de la música y grabándose un video con el celular junto a una de las chicas del grupo.
"Me gusta entretener, es lo que sé hacer. Eso es lo que también la gente y ustedes, los periodistas, buscan con el deporte. Es parte de mi personalidad y creo que es el motivo por el que la gente me ama tanto", afirmó.
Fuente: DPA
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