miércoles 24 de abril del 2024

El problema de Boca: los refuerzos que no sumaron

El golpe que le dio Central desnudó un problema básico: el flojo nivel del plantel. Los jugadores que llegaron eran descartados por otros equipos.

442

Boca B. Boca alternativo. Boca suplente. Contala como quieras. Lo cierto es que el plantel que se quedó afuera de todas las copas que se van a disputar el año que viene merece un análisis. Para el xeneize, quedarse sin competencia internacional es un lujo que no se puede dar. Desde lo deportivo y, por supuesto, desde lo económico. La derrota del miércoles frente a Central que lo eliminó de la Copa Argentina fue un golpe letal. Entonces, se impone el balance. Y si la lupa se posa sobre el equipo que cayó en Córdoba, bueno, ahí se podrán encontrar algunas respuestas. Todo se remite a los refuerzos. Esa lista que suele generar entusiasmo en cada receso, esta vez reforzaron poco.

Línea de fondo. Guillermo Sara llegó del Betis. Allá, en España, ni siquiera era titular. Lo notable es que cuando se incorporó a principio de este año, el titular era Agustín Orion. Se sumó, entonces, como segundo arquero. Recién saltó a la titularidad en agosto, cuando Orion pasó a Racing.

Con los marcadores centrales ocurre algo parecido. Santiago Vergini vino de Sunderland. En Inglaterra no lo tuvieron en cuenta y lo cedieron a préstamo al Getafe. El equipo español lo devolvió, y el club inglés, que se salvó del descenso por dos puntos, lo cedió a Boca. El pase se demoró porque no pasó la revisión médica debido a una lesión crónica. Al final, firmó por tres años.

El caso del otro marcador central, Fernando Tobio, es digno de un premio al mejor compañero. Después de cumplir un año a préstamo durante la temporada pasada, el Mellizo le dice que no lo va a tener en cuenta. El regreso al Palmeiras es inevitable. Pero ahí aparece el gesto fraternal. Carlos Tevez, su amigo, reclama por su regreso. Y lo que pide Tevez es una orden. Entonces en el club le vuelven a renovar el préstamo por un año más.

De los marcadores de punta se podría decir que tampoco llegaron después de una campaña brillante en otro club. Jonathan Silva arribó del Sporting de Lisboa, donde jugó sólo 15 partidos en dos temporadas. Y a Gino Peruzzi lo compraron al Catania, de la B de Italia, por US$ 3.500.000.

Al medio y arriba. Pablo Pérez fue el primer refuerzo de esta temporada. Después de un año en el Málaga, donde jugó once partidos y convirtió un gol, llegó a Boca a préstamo por un año y medio. Hace dos meses compraron el pase por un millón de euros.

Cristian Pavón es, tal vez, el caso que menos compromete a los dirigentes y al cuerpo técnico. El pibe llegó de Colón en diciembre del 14, cuando el equipo santafecino recién había ascendido a Primera. Por supuesto, le faltaba roce en Primera, pero recién había cumplido los 19 años.

La última perlita que se sumó al plantel es Ricardo Centurión. El San Pablo le había pagado más de 4 millones de euros a Racing, pero un año después no era tenido en cuenta.

Así se armó el Boca del Mellizo. Con refuerzos que no jugaban en Primera o estaban descartados en sus equipos. Y eso, en la cancha, se nota.

Angelici quiere inventar una copa. Como hacía Quico en la vecindad del Chavo, el presidente de Boca, Daniel Angelici, quiere inventar reglas y torneos de acuerdo a su conveniencia. Lo reconoció él mismo ayer, luego de la derrota contra Rosario Central que confirmó que Boca no jugará ninguna competencia internacional en 2017.

En diálogo con radio La Red, el presidente xeneize reclamó un lugar en la Copa Sudamericana. “Este campeonato empezó siendo clasificatorio para la Sudamericana y en el medio no se pueden cambiar las reglas de juego. Nos parece bien que las copas sean anuales, pero desde 2018”, argumentó. Pero la queja fue más allá, debido a que no descartó motorizar un nuevo campeonato, “un torneo paralelo sudamericano”, al que supuestamente se sumarían River y otros grandes del continente. “Es difícil, pero no alocado. Necesitamos recaudar y mostrarnos a nivel internacional”, concluyó Angelici.

Además, el presidente reconoció su malestar por el momento del equipo, aunque apoyó al cuerpo técnico y al plantel: “Más allá de cómo jugamos en el segundo tiempo, quedamos afuera de la Libertadores, que era el objetivo del semestre. No me gustó la actitud del primer tiempo porque lo regalamos”, precisó.

Tevez está en duda para mañana. Carlitos trabajó ayer de manera diferenciada en el entrenamiento del plantel de Boca, y aunque no hubo parte médico oficial se supo que tuvo “un golpe en un pie”. Si bien formará parte de los concentrados, está en duda su presencia para visitar mañana a Gimnasia en La Plata.

Tevez fue el primero en llegar al complejo Pedro Pompilio y mantuvo una charla privada de alrededor de 45 minutos con el entrenador Guillermo Barros Schelotto. Después, realizó ejercicios en el gimnasio, pasó por kinesiología, trotó levemente y fue también el primero en retirarse, cuando la actividad de sus compañeros todavía no había finalizado.

El Mellizo decidirá hoy si Tevez formará parte del equipo titular que actuará en el Bosque, teniendo en cuenta que a Boca lo aguardan partidos decisivos, incluidos tres clásicos sucesivos (San Lorenzo de Almagro, Racing y River Plate) antes del receso de fin de año.

Por otra parte, una versión que ayer cobró fuerza indica que el futuro cercano de Tevez podría tener lugar en el fútbol chino, de donde recibió una muy buena propuesta económica. Paralelamente, de acuerdo con el mismo rumor, se irían con él su compañero Fernando Tobio, también de Boca, y el delantero Ramón Wanchope Abila, hoy en Cruzeiro de Brasil.

(*) Esta nota fue publicada en el Diario PERFIL.