El Barcelona pasará a la historia como el vencedor del primer clásico de la historia en Estados Unidos al imponerse por 3-2 al Real Madrid en Miami en el último duelo de la International Champions Cup.
Tres décadas después del último y único duelo de los dos grandes equipos españoles fuera de la península, los goles del argentino Lionel Messi, en el minuto tres de partido, del croata Iván Rakitic, en el 7', y del catalán Gerard Piqué, en el 50', permitieron a los azulgrana anotarse el primer gran triunfo de la nueva temporada en el Hard Rock Stadium de Miami.
El croata Mateo Kovacic recortó distancias para el Real Madrid en el 14' y el español Marco Asensio puso el 2-2 en el 36'. Y aunque buscaron y tuvieron alguna ocasión para anotar el tercero, la buena actuación del arquero Jasper Cillissen permitió a los dirigidos por Ernesto Valverde cerrar una pretemporada redonda con tres victorias en otros tantos partidos.
Después de vencer a la Juventus de Turín y al Manchester United en los anteriores choques, el Barcelona sumó un nuevo triunfo ante el campeón español y de Europa, que contó sus tres partidos en el gigante estadounidense por derrotas.
Tras caer ante el Manchester United y el Manchester City, los hombres de Zinedine Zidane sucumbieron también ante el Barcelona, que se mostró superior durante casi todo el encuentro y siempre se adelantó en el marcador.
Con una presión adelantada y un buen ritmo de juego, los azulgranas, que saltaron a la cancha con su tridente ofensivo y casi todos sus titulares, se colocaron ya con un 2-0 en el primer cuarto de hora de partido.
La movilidad del brasileño Neymar, en el ojo del huracán por su posible traspaso al Paris Saint Germain, y la clarividencia de Messi sorprendieron a los dirigidos por Zidane, que no contó en su once con el portugués Cristiano Ronaldo, pero sí con el español Sergio Ramos, recuperado ya de sus molestias.
Aún de vacaciones, la estrella blanca fue el gran ausente de un duelo que hizo disfrutar de lo lindo a los más de 60.000 hinchas que llenaron el Hard Rock Stadium.
Sin el astro luso para amenazar el arco azulgrana, Kovacic y Asensio asumieron la responsabilidad anotadora e igualaron el choque antes de la pausa, más larga de lo habitual por la actuación del cantante Marc Anthony.
Zidane cambió a cinco de sus jugadores a la salida del descanso y Valverde sólo a Andrés Iniesta, sustituido por Sergi Roberto.
Con más titulares sobre la cancha, el Barcelona recuperó su superioridad, anotó el tanto de la victoria en una jugada de falta lanzada por Neymar y rematada por Piqué y luego desperdició varias ocasiones para ampliar su ventaja.
El Real Madrid pudo empatar a tres en un gran contrataque de Isco, pero Cillissen estuvo brillante.
Los azulgrana lograron conservar su escasa ventaja y llevarse el primer clásico de la nueva temporada, que vivirá dos más en agosto, en la Supercopa de España.
Fuente: DPA
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