Un hombre desnudo irrumpió en la pista del Estadio Olímpico de Londres, donde se disputan los Mundiales de atletismo, minutos antes de la final de 100 metros que tenía al jamaiquino Usain Bolt como gran protagonista.
Antes de que el hombre más veloz del planeta apareciera en la pista, el espontáneo saltó a la recta de meta, completamente desnudo y con una leyenda en su pecho.
El personal de seguridad se lanzó enseguida en su captura y, tras una primera caída de uno de sus perseguidores, el hombre fue atrapado en el césped del estadio y retirado de la pista, con sus partes pudientes tapadas con una prenda de los stewarts.
Orgulloso de su travesura, el hombre abandonó el tartán preso, sonriente, como si hubiera hecho una 'hazaña' como las de Bolt, que posteriormente no pudo vencer en los 100 metros lisos el año de su despedida de las pistas.
Fuente: DPA
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