martes 16 de abril del 2024

Cinco años sin visitantes

La AFA no encuentra alternativas. Que en las canchas haya solo hinchas locales no disminuyó la violencia. Intentos frustrados y promesas incumplidas.

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En mayo pasado, Boca se consagró bicampeón argentino en el estadio de Gimnasia, en La Plata, en un partido donde el único azul y amarillo fue el de las camisetas de sus jugadores. No hubo una bandera en la tribuna con los colores del Xeneize. La clásica imagen de los jugadores que celebran frente a sus hinchas y alguna camiseta que viaja por sobre el alambrado como premio recién se pudo ver más tarde, cuando el plantel se trasladó a la Bombonera. No fue la primera vez que a Boca le pasó esto, ni tampoco fue el único campeón que no pudo festejar ese momento único frente a sus hinchas. Lo que no se sabe es si habrá sido el último.

Este 10 de junio se cumplen cinco años de la muerte de Javier Jerez, el hincha de Lanús asesinado por la policía en el ingreso al Estadio Unico de La Plata. Ese episodio derivó en lo que fue una medida presentada como temporaria, pero que ya cumple media década: la prohibición del ingreso de hinchas del club visitante en los estadios de Primera División.

Este parche, que la mayoría de los altos dirigentes de nuestro fútbol criticó públicamente pero que ninguno sacó, deja en claro que estuvo lejos de ser una solución para frenar la violencia en las canchas. En estos años de prohibición, las muertes no se detuvieron.

Según la ONG Salvemos al Fútbol, tras la prohibición en 2013, murieron 48 personas producto de violencia en el fútbol. Y desde mediados de 2007, cuando se suspendió el ingreso de los visitantes en el fútbol del Ascenso, también tras la muerte de un hincha, la violencia en los estadios se llevó 96 vidas.

En estos años se han hecho algunos intentos para que los partidos se disputaran con hinchas de los dos equipos. En 2015, año de elecciones, se tomó la decisión de que se juegue un partido por fecha con visitantes y que con el tiempo fuera aumentando la cantidad. Pero no hubo avances concretos y la cosa se diluyó hasta que, nuevamente, los hinchas no pudieron acompañar a su equipo de visitante.

Después del Mundial vamos a tener público visitante en la Superliga”, prometió Chiqui Tapia, presidente de AFA, a fines del año pasado. Antes de eso, ya había anunciado que la intención de esta nueva conducción de AFA era que volvieran los visitantes en 2017, lo que finalmente no se concretó.

Frente a la consulta acerca de si hay avances al respecto, desde AFA responden que la última información oficial es la anunciada por Tapia a fines del año pasado: los visitantes volverán después del Mundial. Aunque no dijo cómo ni qué se está haciendo para que esto suceda.

A tono con los tiempos que corren, podríamos leer esta continuidad de la medida como una ayuda del Gobierno para el ahorro de los ciudadanos. Siguiendo la línea de los ingeniosos #MacriTips que se multiplicaron por la web estos días, podríamos decir que, si en lugar de ir todos los fines de semana a la cancha se va cada quince días y solo de local, uno se ahorra la mitad de lo que hubiera gastado en entradas y también el viaje a la cancha del equipo rival.

Dos semanas después del asesinato de Jerez, Newell’s venció a Atlético Rafaela de visitante sin su gente y, horas más tarde, tras la derrota de River con Lanús, se consagró campeón.

El siguiente campeón también se coronó sin su hinchada, San Lorenzo en cancha de Vélez. Luego vinieron los títulos del River de Ramón Díaz, del Racing de Diego Cocca y del Boca de Arruabarrena, los tres con su gente en su estadio.

En mayo de 2016, se disputó la final del torneo de dos zonas. Lanús y San Lorenzo definieron con sus hinchadas en el Monumental, por lo que la parcialidad granate vio a su equipo campeón aunque no fuera en su estadio. El siguiente campeón sin hinchas fue Boca, que venció a Aldosivi en Mar del Plata en junio de 2017 y, tras la posterior derrota del segundo, se consagró. El partido siguiente también fue de visitante y recién se reencontró con su gente en la última fecha.