El arquero Juan Pablo Carrizo y el lateral Paulo Ferrari, dos de los principales referentes del plantel de River, lamentaron hoy el despido de Angel Cappa, a quien valoraron especialmente por sus condiciones humanas, y remarcaron la necesidad de revertir la situación a partir del Superclásico ante Boca.
"El culpable no es siempre el que se va", dijo Carrizo al apoyar a Cappa. Además, expresó que para que un equipo funcione "se necesita tiempo, dos o tres años de trabajo" y, en tono de queja, señaló que en el fútbol argentino se "trata de sobrevivir" y a medida que pasa el tiempo se está "acrecentando esta bola de algo ilógico".
"Estamos dolidos porque el cuerpo técnico es muy buena gente y uno se siente mal y se siente responsable porque los que entramos a la cancha somos nosotros", señaló Ferrari.
Tras afirmar que el plantel siente "tristeza" por el despido de Cappa, Carrizo resaltó que el Superclásico ante Boca es "muy importante", pero remarcó que "River tiene que pensar más allá de ese partido".
"No podemos pensar que ganando ese partido estamos salvados. Tenemos que asumir el momento en el que estamos y no dejarnos llevar por un triunfo si ganamos. Ganando este partido a mi no me va a calmar nada. Los problemas van a seguir estando", argumentó Carrizo en conferencia de prensa.
Si bien los dos jugadores evitaron responder si el sucesor de Cappa tiene que asumir de inmediato o después del Superclásico, Ferrari dejó en claro la necesidad de que "el técnico que venga cambie la mentalidad" que tuvieron "en los últimos partidos".
Mientras tanto, el entrenador interino de River, Juan José López, confirmó tácitamente la presencia del volante Matías Almeyda en el equipo inicial que saldrá a jugar el partido ante Boca si es que el presidente del club, Daniel Passarella, le encomienda dirigir al equipo tras haber echado a Angel Cappa.
"Almeyda me dijo que está bien, seguro le falta algo de ritmo futbolístico. Si nos toca estar en el equipo veremos, pero pienso que Almeyda es de esos jugadores que si está bien, tiene que jugar", dijo sin dudar López.
Si bien dijo desconocer si dirigirá al equipo en el superclásico del próximo martes, López destacó que pone el hombro por la institución pero remarcó que su "compromiso" con Passarella es por cuatro años y al frente de las divisiones inferiores.
"Quiero tener los pies sobre la tierra y el compromiso mío con Daniel es un trabajo de cuatro años, pero le ponemos el hombro a este momento, hay que estar, trabajar y poner lo mejor de cada uno", dijo López en declaraciones a Fox Sports. "La situación es delicada, si se fue un técnico es porque no se dieron los resultados", dijo quien brillara como volante del club de Núñez en la década del '70 y a principio de los '80.
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