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Tras 15 años de sinsabores, Independiente, el viejo Rey de Copas, vuelve a estar en una final de un torneo internacional, después de haber dejado en el camino a la Liga Deportiva Universitaria de Quito al derrotarla por 2-1 en Avellaneda, en el partido de vuelta de la semifinal de la Copa Nissan Sudamericana.
Con un planteo agresivo desde el minuto inicial, que se apaciguó en la media hora final del encuentro, el equipo que dirige Antonio Mohamed accedió a una victoria merecida que le permitió equiparar el 3-2 en contra sufrido hace una semana en Ecuador, y dejar eliminado al último campeón del certamen por los goles convertidos como visitante.
Facundo Parra abrió la cuenta a los 26 minutos de la primera mitad, pero Juan Manuel Salgueiro, a los 45 de la mismas etapa le puso tensión a la noche de Avellaneda. Al minuto de la parte final, Hernán Fredes le dio el triunfo al conjunto argentino. Ahora, el elenco rojo viajará a Brasil para enfrentar a Goias en el primer encuentro de la serie final, que se desarrollará el miércoles venidero.
Independiente realizó un planteo inteligente en el inicio intentando siempre ser profundo por las bandas. Pero Liga se abroqueló bien atrás y en los primeros 20 su defensa fue impenetrable. Esa solidez le dio aire al equipo ecuatoriano para lanzar contragolpes veloces. Y por momentos fue bastante peligroso para un equipo que tenía la pelota pero no hallaba el arco.
Independiente no se amilanó por la muralla ecuatoriana que le cerraba los caminos hacia Cevallos ni se dejó amedrentar por los nervios de su gente en las tribunas. Siguió insistiendo y a los 26 tuvo su premio, en una acción de pelota parada. Cabrera jugó corto un corner para Fredes y éste sacó un centro pasado al segundo palo que cabeceó cruzado Galeano y, a la altura del palo opuesto, Parra no tuvo más que empujar la pelota a la red, también de cabeza.
Ese gol le dio tranquilidad al equipo de Avellaneda para plasmar en la cancha lo que quería su técnico. Entonces, el Rojo estuvo muy cerca de marcar el segundo a los 35 cuando un nuevo centro de Fredes no pudo ser conectado con precisión por Parra, primero, ni por Silvera, en segunda instancia.
Todo era del local, que fue en busca del segundo pero quedó descubierto en defensa. La Liga, con su experiencia copera, empezó a buscar el momento propicio para lastimarlo. Y ese instante llegó a segundos del final de la primera etapa, cuando un contragolpe encabezado por Barcos terminó con un remate de zurda de Salgueiro que sorprendió a Hilario Navarro y se convirtió en el 1-1.
Un grosero error de Urrutia le devolvió la tranquilidad a Independiente en el inicio del segundo tiempo. A los 37 segundos, el jugador de Liga le dio un pase malo a Araujo y no hizo más que regalarle la pelota a Fredes, que con un disparo bajo dejó sin chance al indefenso arquero ecuatoriano.
Después Mohamed intentó fortificar la mitad de la cancha con el ingreso de Godoy por Gómez, pero la apuesta le salió mal porque su equipo perdió la pelota y retrocedió peligrosamente, resistiendo en su campo aunque mostrando solidez en el fondo. También generó algún contragolpe esporádico con el que pudo liquidar más temprano el encuentro, como cuando Galeano sacó un remate cruzado que se fue besando un palo, pero tuvo que sufrir hasta el final.
Liga insistió y estuvo cerca a los 37 con un disparo de Bolaños que pegó en el poste. Pero hasta ahí llegó. Independiente aguantó y sueña con reverdecer viejos laureles. Por lo pronto, ya lo está haciendo.
