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Kim Clijsters, número tres del mundo, ganó hoy el Abierto de Australia al vencer en la final a la china Li Na, 11ª en el ranking de la WTA, por 3-6, 6-3 y 6-3. La belga consiguió así su cuarto título de Grand Slam, el primero que se lleva de tierras australianas (sus otros tres logros fueron en el Abierto de los Estados Unidos).
Clijsters perdió el primer set por 6-3, pero luego pudo recuperarse y se llevó el segundo y tercer parcial por el mismo marcador, sellando así un nuevo título en su carrera.
La belga, que había interrumpido dos años su carrera entre 2007 y 2009, continúa probando que volvió con más fuerza al circuito, tras sus victorias en el US Open en 2009 y en 2010, donde ya se había impuesto en 2005, y después en el Masters en 2010.
Clijsters ganó por fin un torneo que siempre se le escapaba. En Australia había sido finalista en 2004 y cuatro veces semifinalista, pero nunca había logrado el título. Ahora, será desde el lunes la número dos del mundo detrás de la danesa Caroline Wozniacki.
A pesar de la derrota, Li Na cerró un gran torneo, sorprendiendo a todos y además haciendo historia, ya que se convirtió en la primera tenista china en jugar una final de Grand Slam. Además, desde el lunes será la séptima jugadora del mundo, su mejor clasificación y la más alta alcanzada por una jugadora de su país.
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