viernes 19 de abril del 2024

William Schlenker negó ser barrabrava

Uno de los imputados por el crimen de Acro se desprendió del hecho y habló de los vínculos de Rousseau con Jose María Aguilar y Daniel Passarella.

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William Schlenker, uno de los imputados de ser el instigador del crimen de Gonzalo Acro en el marco de un enfrentamiento interno en la barra brava de River, negó hoy haber impulsado el asesinato por "celos" o "venganza", tal como le había enrostrado la semana pasada un testigo. Al mismo tiempo, afirmó que él no es barra brava y que su papel en la hinchada era "intrascendente".

"No envidio ni envidié a nadie. Ni la posición económica, ni la novia, ni nada. Jamás envidié a nadie. (Gonzalo, amigo de Acro) Goñi mintió cuando declaró ante este tribunal", dijo el menor de los Schlenker ante el Tribunal Oral en lo Criminal 15, que lleva adelante el juicio.

Goñi había deslizado que William instigó el crimen de Acro porque éste -lugarteniente del líder de una facción de la barra brava, Adrián Rousseau- le ganó una pelea en la denominada "batalla de los quinchos", y además mencionó un supuesto desaire amoroso de una ex novia de ambos.

"Yo gané esa pelea. Ese día me peleé con cinco. Queríamos con Alan (Schlenker) ir a pegarle a Rousseau; cuando llegamos a los quinchos Alan empezó a pelearse con Adrián y yo me peleé con cinco en distintos momentos porque ellos querían evitar que mi hermano le ganara la pelea a Adrián, para que no quedara mal parado", relató William ante la atónita mirada del tribunal.

Cuando finalizó esa reyerta ("Alan le hinchó un ojo y la boca a Rousseau, yo lo vi buscando un diente por el piso"), William contó que llegó Gonzalo Acro preguntando qué había pasado y allí ambos se trenzaron en una pelea.

"Yo le gané por puntos. No perdí esa pelea. Cuando terminamos, Alan se paró y dijo 'listo, aquí no pelea nadie más, dense la mano'. Yo no quería, pero Gonzalo estiró su mano y se la di. Y ahí terminó todo. Esa fue la última vez que vi a Gonzalo", relató.

"Si yo hubiera perdido la pelea no lo hubiera mandado a matar. Hubiera pedido revancha y me habría preparado para eso. Es ridículo pensar que yo mandé a matar a Gonzalo", insistió.

En cuanto a la cuestión amorosa, el testigo Goñi había mencionado una supuesta disputa por una joven, pero William situó la relación que ambos tuvieron con ella en dos momentos distintos y separados por dos años de distancia.

Pero además el menor de los Schlenker le restó trascendencia a la relación que la mujer mantuvo tanto con Acro como con él: "No sé a quién de los dos le importaba menos".

William Schlenker fue muy duro con relación a Rousseau, sobre quien dijo que "vivía en Laferrere, su padre es taxista y su madre manejaba algunas prostitutas en prostíbulos de bajo nivel; nunca trabajó y ahora tiene un hotel, un kiosco, dos departamentos en Belgrano, un departamento en Cañitas, una (camioneta Toyota) Hilux y una moto que vale 20 mil dólares. Su patrimonio supera el millón de dólares".

Según William, el crecimiento patrimonial de Rousseau se produjo con la llegada de José María Aguilar a la presidencia de River y directamente responsabilizó al ex titular de la institución de Núñez de canalizar dinero hacia el jefe "indiscutidísimo" -como lo calificó- de la barra brava.

"Todos saben que Rousseau tiene excelente relación con (Daniel) Passarella, con Aguilar y con Mario Israel. Los que manejaban el club, que son los mismos que lo manejan ahora", remató.

Cuando el fiscal le preguntó por su rol, Schlenker dijo "no soy barra brava, mi función era intrascendente; el líder indiscutido era Rousseau, pero no me daba órdenes porque sabía que yo no las iba a cumplir".

Schlenker dijo que en cambio Rousseau "es barra brava". Y describió a un barra brava como "el que vive del fútbol, no trabaja, recibe plata del fútbol y tiene causas en la Justicia".

Fuente: DyN

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