viernes 29 de marzo del 2024

River-Boca se palpita hasta en Moscú

El partido más importante del fútbol argentino, que se juega hoy en la Bombonera, no tiene fronteras. Cómo llega a cada rincón un producto bien nacional.

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Aun devaluado, el clásico entre Boca y River imanta (o parece imantar) a los medios de comunicación del mundo. Para el partido de hoy, sin ir muy lejos, se acreditaron 26 periodistas de 13 países (España, Alemania, Italia, Inglaterra, Francia, Turquía, Israel, Estados Unidos, Venezuela, Paraguay, Chile, Brasil, Uruguay). En total, 18 medios: siete diarios, cinco canales de televisión, dos agencias de noticias, dos radios y dos revistas. “Se va a televisar en todos los continentes, hasta en Africa”, le comenta a PERFIL el director de derechos y eventos de TyC, Leonardo Ellenberg.

En consecuencia, PERFIL entrevistó a 12 periodistas extranjeros para averiguar cómo se palpitaba (si acaso se palpitaba) el clásico en sus países.

Rusia mata Brasil. “Acá pasan los partidos –cuenta el periodista argentino Matías Varela, que trabaja en el canal Russia Today– y a la noche, en el noticiero, los goles de la fecha. Después, en canales deportivos, como NTV Plus Sport, han pasado informes. La gente conoce a los jugadores, y no sólo a Almeyda, Palermo o Riquelme. También a Lamela o Pochi Chávez. El otro día estaba viendo Boca-Huracán y grité el gol de Palermo, y un pibe me miró y me preguntó si el ‘abuelo’ (así lo llamó) seguía haciendo de las suyas.”

En contraposición, Carlos Augusto Ferrari, periodista de O Globo, analiza: “En Brasil, Boca-River va televisado, pero la cobertura en los diarios nunca es muy grande. La gente no tiene idea de que Boca y River vienen mal. No se le da demasiada importancia al campeonato argentino”.

En América latina. El hondureño Eduardo Bennett jugó en San Lorenzo entre 1993 y 1995 y en Argentinos Juniors entre ese año y 1999 (una vez, Diego Maradona lo trató de “negro de mierda” delante de las cámaras de televisión). “En Honduras –explica Alexeiev Morales, editor del diario El Heraldo, de Tegucigalpa– se sigue el fútbol argentino desde que Bennett fue a jugar allí. Hoy, Boca-River es el partido más importante después de Barcelona-Real Madrid. Muchísima gente anda con la camiseta de Boca por la calle. Pero periodísticamente no tiene todavía relevancia. La gente sabe bien quiénes son Carrizo, Riquelme, Almeyda o el Titán, pero es impensable que te den las alineaciones como sí lo hacen con Barcelona-Real Madrid.” Detalle: hasta hace dos años, el único diario deportivo de Honduras, Diez, sorteaba viajes a Buenos Aires para presenciar el clásico.

En el resto de América latina, la historia, con matices, se repite. En Perú, por ejemplo. Lo describe Carlos Laras Porras, del diario Perú 21: “Aquí hay mucha expectativa por este duelo. Incluso, muchos peruanos prefieren ver este partido que los de Alianza o Universitario, los clubes más importantes de nuestro país. Por lo general, las emisoras cogen la señal de alguna radio argentina para seguir por momentos las incidencias. Hace un par de años, en el aeropuerto de Cuzco, en un puesto de lustrabotas estaban escuchando el clásico en una radio argentina por Internet”.

Elías Leonardo Salazar, periodista mexicano de la web El Buen Fútbol, apunta que “en los últimos años ha disminuido la atención sobre el clásico debido a la no obtención de títulos de Boca o River. Pero igual se va a seguir con atención”.

Jorge Urzúa, de TVN de Chile, señala: “Esta vez, el clásico de la Argentina se topa con el clásico entre la Universidad de Chile y la Católica, por lo que la audiencia va a bajar, aunque en los noticieros se va a poder ver el resumen del partido como siempre”.

En el resto del mundo. Conchita Roura, de El Mundo Deportivo, justifica el desinterés por el clásico en España: “Se televisa, sí. Pero no hay demasiado interés porque Boca y River vienen mal, y sobre todo porque los mejores futbolistas argentinos juegan en Europa y entonces, y lo digo con todo respeto, ¿qué tiene para ofrecer el fútbol argentino de diferente? Pero, desde ya, será una fiesta

para los argentinos que viven aquí”.

Jean-Baptiste Renet, de L’Equipe, se sincera: “La gente en Francia no sabe que se juega el clásico argentino. Se conoce muy poco de Boca y River. A Boca se lo asocia con Maradona, por ejemplo”.

Ben Lyttleton, de The Mail on Sunday y de Sports Illustrated, complementa: “En Inglaterra, un Boca-River no importa. Pero tampoco un Milan-Inter. Rara vez caen en el radar de los medios ingleses partidos que no sean de la Premier League”.

“En Japón no se televisan los partidos de Argentina”, apunta Cesare Polenghi, periodista italiano de la página web Japanese Soccer, que añade: “A los japoneses les interesan más las selecciones que los equipos. Cuando Argentina jugó ante Japón en Saitama en 2010, había dos mil japoneses con camisetas argentinas”.

“Ni siquiera sabía que se jugaba el clásico”, confiesa Tim Martin, editor de Deportes de Australian Times. “De Medio Oriente, sólo en Israel se lo sigue con muchísima atención”, puntualiza James Dorsey, un ex periodista de The Wall Street Journal que escribe el blog The turbulent world of Middle East soccer.

Por lo demás, se sabe, en Medio Oriente están ocupados hoy en otra cosa.

Esta nota fue publicada en la Edición Impresa del Diario Perfil