La rusa Maria Sharapova, quinta preclasificada, y la checa Petra Kvitova, octava favorita, jugarán el sábado una final inesperada en Wimbledon.
La rusa se impuso a la alemana Sabine Lisicki por 6-4 y 6-3 mientras que la checa superó a la bilorrusa Victoria Azarenka por 6-1, 3-6 y 6-2, consiguiendo así su primer boleto a una final de Grand Slam en la catedral del tenis.
En cambio para Sharapova se trata de la quinta final en uno de los torneos denominados grande, y de su primera final desde hace más de dos años y medio.
Operada en un hombro a fines de 2008, Sharapova necesitó tiempo para regresar a su mejor nivel. "Es una gran emoción volver a la final. No fue mi mejor partido pero estoy aliviada de haber ganado en dos sets", aseguró.
"Ella jugaba bien y yo al revés, pero seguí concentrada y logré volver a meterme en el partido", comentó Sharapova, quien batió a la número 62 mundial que jugaba su primera semifinal de Grand Slam a sus 21 años.
Para la final del sábado, Sharapova no se pone presión extra pese a que todos la señalan como favorita. Enfrente estará Kvitova, de 21 años y número 8 mundial, que aún no cree haber llegado a la final.
"Me cuesta creerlo, comencé muy bien. El punto clave del partido fue el servicio y, afortunadamente, logré encontrar otro vez mi primera bola en el tercer set. Estoy tan pero tan feliz", dijo la checa luego de una hora y 44 minutos de juego.
Kvitova se convirtió hoy en la primera checa en acceder a una final de Wimbledon desde la victoria de Jana Novotna en 1998 y la cuarta jugadora de su país en la historia luego de Martina Navratilova y Hana Mandlikova.
Además, es la primera zurda en disputar una final de Grand Slam desde que Mónica Sales disputó el duelo decisivo de Roland Garros en 1998.
Fuente: AFP
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