Si bien se disculpó el domingo y no recibirá sanción alguna por ello, la negativa del uruguayo Luis Suárez a estrecharle la mano al francés Patrice Evra el último sábado sigue mereciendo el repudio unánime de la comunidad futbolística internacional, e incluso dentro de su club (el Liverpool) se mostraron muy molestos al respecto.
El hecho se produjo en la ceremonia de saludo entre los jugadores de uno y otro equipo previa al encuentro que el Manchester United de Evrá le ganó 2-1 al Liverpool de Suárez, quien cuatro meses atrás había protagonizado otro episodio lamentable propinándole insultos racistas al defensor galo que le provocaron una suspensión de ocho partidos, además de una multa de 48.000 euros.
La imagen más esperada desde aquel episodio ocurrido el 15 de octubre de 2011 en el estadio del Liverpool era la del saludo entre los jugadores antes del partido, pero Suárez pasó de largo ante Evra. El francés agarró el brazo del uruguayo para intentar forzar el apretón, pero el delantero se liberó con un gesto brusco y estrechó la mano del siguiente, el español David De Gea.
El comportamiento del uruguayo ha molestado al director general del Liverpool, Ian Ayre, quien aseguró que Suárez le había dicho que saludaría a Evra y comentó que el club le ha recordado al jugador su responsabilidad de no dañar la reputación de la entidad.
"Estamos muy decepcionados por la actitud de Luis Suárez. No sólo se ha defraudado a si mismo, sino también a Kenny Dalglish (entrenador) y a sus compañeros", añadió Ayre.
Mirá el video con lo ocurrido:
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