Francesca Piccinini, una histórica de la selección de vóley italiana, no podrá subirse al podio en los Juegos Olímpicos. Su equipo cayó en cuartos de final ante Corea del Sur y quedó afuera de la lucha por las medallas, pero ella demostró que a los 33 años sigue vigente. Y también deslumbró al público por su belleza.
Piccinini, que mide 1.84 metros y es compañera de la argentina Carolina Costagrande en la Azzurra del vóley femenino, empezó a jugar a los 8 años y no paró hasta convertirse en toda una referente de su selección.
Francesca, que ya había participado en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, Atenas 2004 y Beijing 2008, también saltó a la fama por sus comentados desnudos para revistas como Playboy y Men's Health. En Londres, seguro la recordarán.