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Recibió un codazo, buscó a su rival y le frotó por la cara la sangre que brotaba de su propio rostro. Chicao, el jugador de la tercera división brasileña que días atrás protagonizó este inusual incidente, fue suspendido por dos partidos debido a su accionar en el duelo entre el Santa Cruz y el Fortaleza.
Chicao, volante del Santa Cruz, se enojó tras recibir un codazo de parte de Esley. Cuando vio que le salía sangre, se tocó la cara con su mano y la frotó contra el rostro de su rival. El incidente terminó con un gresca generalizada y la expulsión de ambos jugadores. A Esley le dieron cinco partidos por el codazo y a Chicao, dos.
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