Con un perfil más bajo acordado con la nueva dirigencia de River, Ramón Diaz dio el equipo que enfrentará el sábado a Boca y aseguró que ni él ni su colega Carlos Bianchi se ponen en juego en estos clásicos de verano, al destacar que la importancia está en el torneo oficial.
Ya no distribuye chupetines, no esquirla ironías de sus respuestas y solo se limita a contestar llanamente sin la picardía de los buenos tiempos. Ramón se juega mucho en el próximo torneo, pues el último semestre esmeriló profundamente su pedestal.
Si bien el técnico admitió que podría jugar Eder Alvarez Balanta o Rogelio Fúnes Mori en la zaga izquierda, no arriesgaría al colombiano pese a que solo tiene una fatiga muscular en el aductor izquierdo e hizo diferenciado, por lo cual en cancha estaría el mellizo.
El equipo que dio forma con Marcelo Barovero; Gabriel Mercado, Jonatan Maidana, Funes Mori o Balanta; Carlos Carbonero, Leonardo Ponzio, Cristian Ledesma, Leonel Vangioni; Manuel Lanzini; Teófilo Gutiérrez y Fernando Cavenaghi.
Nada que ver con la previa a otros clásicos estivales: "Sabemos que es un partido importante pero que sepan también que es un partido de preparación".
También admitió que pondrá "lo mejor" que tenga a disposición para los otros dos clásicos, tal cual adelantó Bianchi en Mar del Plata, aunque dio posibilidades a que haya algunos cambios.
Ante una consulta, Díaz rechazó que tanto él como Bianchi se jueguen sus puestos en estos tres enfrentamientos. "Estos partido son importante para el club, pero más importante es el campeonato. No hay nada en juego con respecto de los entrenadores. Queremos poner el equipo en condiciones para el torneo que es más importante", insistió.
Resaltó el buen momento del tándem Teo Gutiérrez y Fernando Cavenaghi, pero también destacó que esta vez tiene una pretemporada con todos los jugadores, pese a que solo logró un refuerzo.
"Tenemos un plantel bárbaro y variantes en todos los sectores además de jóvenes con gran futuro", sostuvo.
Adelantó que irá a jugar partidos en Salta y San Luis porque "le sirve económicamente" al club y que ante ello espera "salir de la mejor manera y no tener lesionados para poder llegar al torneo al cien por ciento". De esa forma, Ramón aceptó jugar pero sus palabras dejan ver el temor de que esos partidos puedan dejar secuelas.
Reconoció finalmente que está ejercitando un "perfil más tranquilo" y dio a entender que la línea baja de arriba. "Es un momento diferente, ha comenzado a cambiar desde arriba", dijo.
Sobre el final dio, literalmente, "cerrado el tema" del uruguayo Rodrigo Mora, con quien tuvo una difícil relación, que derivó en una salida. "Había varios atacantes, se le dio la posibilidad de ir a Chile. Tema cerrado", concluyó.
Fuente: DyN
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