viernes 19 de abril del 2024

Sochi y una apertura impresionante

Son los juegos más caros y blindados de la historia: gastaron 50 millones y hay más de 37 mil policías. Homofobia y mojada de oreja de Google. Fotos. Galería de fotosGalería de fotos

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En la ceremonia de apertura de los Juegos de Invierno de Sochi 2014, los más caros de la historia, Rusia en un magnífico despliegue mostró su historia y cultura, rodeados de extremas medidas de seguridad. Las exdeportistas Irina Rodnina y Vladislav Tretyak encendieron el pebetero.

Rodnina ganó tres oros olímpicos en patinaje artístico, mientras que Tretyak fue la estrella del equipo de hockey sobre hielo que ganó el título olímpico en 1972, 1976 y 1984. Dos íconos del deporte de la época soviética, que tienen ahora 64 y 61 años, respectivamente.

Las últimas en llevar la llama fueron la tenista Maria Sharapova y la plusmarquista mundial de salto con pértiga, Yelena Isinbayeva.

El director de la ceremonia, Konstantin Ernst, trató de plasmar en el flamante estadio Fisht, que será sede también en el Mundial de fútbol de Rusia-2018, las singularidades de un país de 17 millones de kilómetros cuadrados y más de 150 etnias.

"He querido acabar con los estereotipos de Rusia: el caviar, las muñecas Matriochka, las balalaikas o los osos, queriendo presentar la historia de Rusia bajo los ojos de una niña", afirmó Ernst antes de la ceremonia.

La historia y culturas fueron mostradas de la mano de una niña llamad Lubov, que significa amor en ruso, y que a través del tiempo y el espacio, se paseó por el devenir de los siglos del país mas extenso del mundo.

De este modo el viaje al que fueron invitados los 40.000 espectadores, incluidos los 44 jefes de estado y de gobierno presentes, tuvo como protagonistas al alfabeto cirílico, a la bandera rusa, a las voces líricas del país, a los ritos, las festividades, Moscú, Pedro el Grande y Leon Tolstoi, entre otros.

Vladimir Putin recibió en el estadio a 44 grandes dignatarios internacionales, incluido el secretario general de la ONU Ban Ki-Moon, aunque hubo ausencias destacadas, muchas en protesta por la política rusa en materias como los Derechos Humanos y la ley sobre la "propaganda" homosexual.

Casi 3.000 atletas de más de 80 países deben tomar parte en las pruebas repartidas entre el sitio costero de Sochi y Rosa Khutor, en las montañas del Cáucaso ruso, en un evento con las mayores medidas de seguridad de la historia del evento y los más caros.

Putin gastó 50.000 millones de dólares en infraestructuras y la ciudad está tomada por 37.000 policías, cuando la población de Sochi es de 350.000 personas, para evitar atentados de los grupos islámicos de las repúblicas del Cáucaso del Norte, sean las protagonistas hasta ahora.

La preocupación se ha acrecentado después de los dos atentados suicidas que causaron 34 muertos a finales de diciembre en Volgogrado, a 700 kilómetros de Sochi.

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