El River revitalizado del segundo tiempo en Medellín y el empate salvador de Leonardo Pisculichi alimenta la preparación de la fiesta por la chance que tiene el miércoles de quebrar una racha de 17 años sin títulos internacionales, al punto que el presidente Rodolfo D'Onofrio destacó que se requerirán "dos estadios" para albergar la pasión del hincha riverplatense.
Tanto jugadores como dirigentes son cautelosos en cuanto a no festejar antes de tiempo, sobre todo después del susto que le dio el gran primer tiempo de Nacional, que bien pudo ser más holgado que el 1-0 ajustado, que River en el segundo tiempo pudo emparejar.
Pero la llegada del plantel este mediodía a Ezeiza, con cientos de hinchas y decenas de periodistas, dio cuenta sobre las expectativas que hay en River para coronar un gran año.
Amén de no gastar a cuenta, D'Onofrio dejó en claro que "esto ya es una fiesta" y que "se va a vender todo".
"Necesitaríamos dos estadios porque River será una gran fiesta con el público aunque hay que esperar el partido porque Nacional es un equipo muy difícil".
Es que el 17 de diciembre de 1997, el River que conducía Ramón Díaz le ganaba 2-1 a San Pablo con dos goles de chileno Marcelo Salas y se despedía de las celebraciones internacionales, con toda la oscuridad que vino después, descenso incluído.
Encima al revancha contra Nacional llegará con la victoria fresca sobre Boca en un superclásico copero y con chances de hacer doblete en el campeonato local pese a la luz que le lleva Racing.
Los jugadores son prudentes porque fueron los que sufrieron en carne propia el vendaval que significó el primer tiempo en el Anastasio Girardot.
"Fue un paso importante, fue un gran segundo tiempo, pero aún no hay definido nada", apuntó cuidadoso Fernando Cavenaghi.
"Esperemos poder definirlo y aprovechar la localía", se esperanzó el arquero Marcelo Barovero.
Matías Kranevitter volvió a jugar luego de casi tres meses, pero el hombre fundamental del gran River de comienzo de torneo no se preocupa por si volverá a estar o no en cancha en el Monumental: "lo único que queremos es ganar en casa".
"Sacamos un buen resultado pero no es determinante", aclaró Ariel Rojas.
Fuente: DyN
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