Con un rendimiento superlativo en varios de sus intérpretes ante un adversario claramente inferior, y sin su máxima figura, Lionel Messi, flamante campeón de la Champions League europea, el seleccionado argentino demolió esta noche a su par de Bolivia con un contundente 5-0 en San Juan, en su último partido antes del debut en la Copa América de Chile, el 13 de este mes ante Paraguay.
Sergio Agüero, con un triplete, uno de ellos de penal, y Angel Di María, con un doblete, también capitalizando en una oportunidad una pena máxima, fueron los responsables del abultado marcador en favor del elenco albiceleste en un Estadio San Juan del Bicentenario que no lució repleto, pero contó con un excelente marco de público.
Además de Messi, Argentina no contó con Javier Mascherano, también campeón con Barcelona, Carlos Tevez y Roberto Pereyra, los dos últimos integrantes del otro finalista en Berlín, Juventus de Italia.
Tampoco estuvieron por lesiones dos habituales titulares, Pablo Zabaleta y Lucas Biglia. Tras el debut ante el elenco guaraní que conduce Ramón Díaz, el actual subcampeón del mundo enfrentará a Uruguay el 16 de este mes, y cuatro días después cerrará su participación en el Grupo B de la Copa América ante Jamaica.
El primer tiempo fue un monólogo del elenco argentino, que minimizó a su rival maximizando la abismal diferencia de jerarquía, presionó bien alto, jugó a un pase, o máximo a dos, intentó utilizar todo el ancho de la cancha, contó con actuaciones superlativas como el caso de Agüero, Di María, Ever Banega y Javier Pastore, y mostró en todo momento la ambición de llegar hasta el arco contrario con jugadas elaboradas y sincronizadas a máxima velocidad.
Apenas habían pasado 46 segundos cuando Agüero advirtió el inminente vendaval albiceleste con un derechazo cruzado que hizo estremecer el palo derecho del arco boliviano.
El acceso libre por la zona media del campo contrario permitió a los de Gerardo Martino explotar al máximo sus virtudes y así apareció Di María para enganchar hacia el centro y exigir a Romel Quiñonez con un derechazo, y luego Agüero y Ezequiel Lavezzi para merodear la apertura del marcador, este último en dos ocasiones.
Hasta que a los 24 llegó el quiebre inevitable, la caída de una endeble resistencia del elenco boliviano, tras una buena combinación entre Javier Pastore y Di María, que acabó con un zurdazo cruzado del volante que fue a parar al costado interno izquierdo de la red.
Los siguientes seis minutos fueron de dominio absoluto del subcampeón del mundo: a los 27, Lavezzi recuperó un balón en tres cuartos de cancha, descargó en Banega y fue a buscar la devolución, instante en el que fue derribado por Sebastián Gamarra cuando se preparaba para encarar hacia el arco rival.
Un minuto después, Agüero cambió por gol el penal bien sancionado por el chileno Jorge Osorio, y aumentó una distancia que a los 30 volvió a incrementarse gracias a que el propio Kun se anticipó a Quiñonez con la punta del botín, tras un envío desde la derecha de Di María.
En los últimos quince del primer tiempo Argentina bajó la intensidad y Bolivia paró de sufrir, pero con la sensación de que si los del Tata apretaban el acelerador, podían volver a desnivelar.
Uno de los enigmas en el inicio del complemento era saber si Argentina bajaría un par de marchas o seguiría acelerando en la etapa final, aunque esa incógnita se despejó rápidamente.
Es que Agüero marcó su triplete a los cinco con una excelente jugada personal que culminó con un bombazo cruzado de zurda para el 4-0.
Y los 8, Pastore forzó una mano en el área del ingresado Miguel Hurtado, Osorio sancionó el segundo penal de la noche y a los 9 Di María ejecutó a Quiñonez con un remate esquinado a la izquierda del arquero.
El resto del encuentro fue complementario y sólo quedó como dato relevante la curiosa salida de Di María, acalambrado pero con posibilidades de seguir en cancha.
Por exclusiva decisión de Martino, el volante rosarino dejó el campo de juego para no arriesgar y como Argentina no tenía más jugadores disponibles (Zabaleta y Biglia no estaban en condiciones) el conjunto albiceleste jugó los últimos 20 minutos con un hombre menos.
Fuente: DyN
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