Cada vez es más importante la pelota parada en un fútbol argentino donde a la mayoría de los equipos les cuesta sacar diferencias en el juego.
Muchos planteles cuentan con ejecutantes especializados para tiros de esquina y tiros libres. Pero de a poco empiezan a verse especialistas en laterales como Ernesto Goñi, de Tigre, o Federico Lértora, de Arsenal, por citar casos conocidos de jugadores que desde muy lejos pueden meter la pelota en el punto del penal.
En esta oportunidad fue en la Primera D en el partido entre Yupanqui y El Porvenir. Leandro Badalovich sacó con fuerza desde el costado, la defensa miró, la pelota picó y superó al arquero Maximiliano Díaz, que cuenta con una enorme responsabilidad en el gol que definió el partido.
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