Un nuevo hecho de violencia tuvo lugar en el ámbito del fútbol, en esta caso en Sudáfrica donde se vivió una verdadera batalla campal. El equipo Orlando Pirates perdía 5 a 0 ante Mamelodi Sundowns y los hinchas del conjunto perdedor comenzaron a lanzar objetos al campo de juego.
Todo empeoró cuando Mamelodi convirtió el sexto gol, lo que desató la furia de los visitantes, quienes invadieron el campo de juego. Decenas de aficionados hicieron destrozos y fueron a agredir a los jugadores.
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Los futbolistas huyeron al vestuario perseguidos por los hinchas quienes los amenazaban con palos y asientos que extrajeron de las tribunas.
La ira por la goleada se contextualiza en que los Pirates, el equipo sudafricano más importante de país, están a 6 unidades de los puestos de descenso.
Finalmente, la policía logró contener a los violentos y el cotejo se reanudó y finalizó 6-0.