442
Una pelea de artes marciales mixtas terminó casi antes de empezar ya que a los diez segundos el árbitro decidió interrumpir el combate porque uno de los luchadores recibió una enorme cantidad de golpes y ya no oponía resistencia ante el avance de su rival.
Pero más allá de lo llamativo de la corta duración de la pelea, lo peor fue lo que pasó después. El perdedor, todavía aturdido por la paliza que había recibido, arremetió contra el juez y le hizo una llave de judo que lo asfixiaba y solo pudo volver a respirar gracias a la ayuda de auxiliares que saltaron al octágono para resguardar su integridad física.
También te puede interesar