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Gimnasia y Esgrima de Mendoza venció hoy a Quilmes 4-1 en la definición por penales y avanzó a los 16avos de final de la Copa Argentina tras 90 minutos opacos que terminaron sin goles.
Ni el equipo cuyano, que está pujando por ascender al Nacional B, ni el Cervecero, que reservó a varios titulares, generaron demasiadas acciones de riesgo en cancha de Temperley y por eso hubo que recurrir a los tiros desde los once metros.
En esa instancia fue más certero Gimnasia y ahora esperará al ganador del choque entre Talleres de Córdoba y Defensores de Belgrano.
Después de un principio en el que el Lobo mendocino sorprendió y se arrimó al arco defendido por Horacio Ramírez, Quilmes, que utilizó un equipo alternativo, niveló las acciones.
Por un lado Nery Espinoza guiaba al conjunto cuyano, al que le faltaba algo de profundidad. Por el otro, el cervecero se arrimaba de la mano de Hernán Da Campo. De hecho, fue este último quien generó las dos escenas más claras de la etapa.
La primera a través de un disparo de media distancia que se fue cerca y la segunda tras una apilada que terminó con un disparo débil que murió en las manos de Tomás Marchiori.
El segundo tiempo, salvo por algún chispazo de Da Campo, terminó convirtiéndose en un concierto de errores y no hubo más que recurrir a la definición desde el punto del penal. Y en esa instancia Gimnasia no perdonó.
Fuente: DyN
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