martes 23 de abril del 2024

Romero y Sampaoli, a la hora del saber

Tras la imprevista lesión del arquero, comenzaron las conjeturas de todos los sectores. ¿Qué es el bloqueo articular que sufrió Chiquito?

442

El fútbol tiene un azar que nadie puede prever. Nadie. No hay prestidigitador, ni adivino, ni Dios que lo pueda anticipar. El affaire de los arqueros de la selección argentina para el Mundial es una nueva muestra. Aunque pueda parecer inesperado, no es la primera vez que pasa. Sólo el tiempo, dirá.

La historia copera recuerda cómo la delegación de España se quedó sin arquero. Estaba concentrada en un hotel en Jerez preparándose para el comienzo del Mundial Corea Japón 2002 y era uno de los últimos entrenamientos previo a emprender el viaje a Asia. Era un mediodía caluroso. La práctica había concluido hacía un par de minutos y Santiago Cañizares se acababa de bañar. Sin querer, casi sin darse cuenta, tocó con el codo el frasco de colonia que estaba en el borde de la mesada y éste empezó a caer. A diez años después de aquel momento lo contaba con una sonrisa despreocupada y entendiendo la incredulidad general. Instintivamente, como le ocurriría a casi todos los futbolistas, tan acostumbrados a utilizar el pie para situaciones y circunstancias cotidianas, intentó con el antepié derecho descalzo amortiguar la caída del envase para que no se rompiese, con tanta mala suerte que no solo no logró su cometido sino que una de las esquirlas del frasco le cortó el tendón del dedo gordo (Hallux). En un par de minutos, el Dr. Genaro Borrás, médico de la delegación, confirmó la mala noticia y el entrenador de la selección española (Camacho) se quedó sin arquero. Faltaban un par de días. Igual que ahora en la selección argentina.

Con la lista definida que dejó un tendal de heridos y muy pocas sorpresas, Sampaoli y sus muchachos se juntaron en Ezeiza a entrenar. Todavía bajo el formato de concentración optativa. Era la mañana del martes. Al terminar la práctica, un rumor empezó a correr desde el consultorio médico del predio hasta los pasillos de la AFA en Viamonte 1366: el arquero titular en las dos últimas Copas del Mundo, había sufrido una lesión en la rodilla derecha y quedaría desafectado de la lista de convocados. ¿Qué hizo para lesionarse en un entrenamiento? ¿Cómo explicar lo incomprensible? ¿Acaso no estaba recuperado de la lesión en marzo? El escueto comunicado de la Asociación Argentina de Fútbol tampoco aclaraba demasiado "Sergio Romero sufrió un cuadro de bloqueo articular en su rodilla derecha que lo dejará fuera de la convocatoria".

Seguramente, llegado a esta instancia, usted se preguntará: ¿Qué es un cuadro de “bloqueo articular”?, porque nunca lo escuchó antes. No lo escuchó antes, porque no es un diagnóstico, es una descripción de un signo objetivable, una forma vaga de definir de manera técnica una alteración (sea por dolor u obstrucción), en el correcto rango de movimiento de una articulación. En este caso, la rodilla derecha.

Si algo le faltaba al entuerto de los arqueros y la lesión de Romero, que ya venía cargado por el operativo “clamor periodístico popular pro-Armani” y lo que esto generó en los colegas, es la “intromisión” de los allegados y familiares en las redes sociales. Primero fue el padre de Nahuel Guzmán, caricaturizando a Sampaoli con una remera chilena, cuando su hijo quedó como cuarto arquero y fuera de la lista de los 23, y ahora fue la mujer de Sergio Romero, intentando sentar postura y tratando al entrenador de inepto cuando no había ninguna voz oficial comunicando el tema. Antes que leer o prestarle atención a lo que dicen los adláteres, es preferible intentar ponerse en el lugar de los que juegan.

No ha habido una confirmación oficial sobre el diagnóstico pero, por lo que es de público conocimiento, se infiere que el bloqueo articular de Romero es a consecuencia de un proceso degenerativo del cartílago, llamado técnicamente condromatosis, donde “condro” significa cartílago y “osis”, proceso. El tratamiento no es único e indiscutible pero, en líneas generales con los futbolistas profesionales con antecedentes patológicos en la articulación, como es el caso de Chiquito, la toilette o “limpieza” quirúrgica es el procedimiento de elección. ¿Cuánto puede demorar para estar nuevamente en condiciones? Nadie puede dar una respuesta absoluta y concreta, pueden ser quince días o mucho más, todo depende de la evolución. A partir de aquí, las conjeturas.

¿Es ilógico que Sampaoli haya desafectado a Romero cuando los especialistas no pueden garantizar que esté en condiciones para el primer partido? No, para nada: es una potestad del entrenador seleccionar a los que cree que están mejor para disputar esa competencia única, que dura apenas un mes y no se vuelve a repetir en cuatro años, llamada Mundial de fútbol. ¿Es extraño o desubicado que Sergio Romero esté muy enojado por ser desafectado de la lista, cuando fue el arquero titular los últimos dos mundiales, atajó siempre en buen nivel con Argentina, todavía falta un mes para la competencia y existen chances de que él esté en condiciones de atajar? No, para nada: perfectamente Sampaoli podría haber esperado, al fin de cuentas está llevando tres arqueros para ocupar un puesto y hubo jugadores en listas mundialistas que al momento de ser confirmados no estaban en condiciones pero contaban con la confianza del entrenador.

Como decía Panzeri, “la vida y lo que sabemos es un gran conjunto de cosas que ignoramos. Que crecen a medida que más sabemos. En el fútbol pasa lo mismo. Hay dos saberes, dos idoneidades nunca perennes: la de afuera, que es saber elegir y seleccionar y la de adentro que es jugar.” Sólo Franco Armani y su saber actuar, sostendrá a Sampaoli de ser juzgado y castigado por su elección. El fútbol, como se vive en la Argentina, tiene azar pero no tiene atenuantes.