La final de la Champions League en el estadio Olímpico de Kiev, en la que se consagró tricampeón el Real Madrid, sigue dejando tela para cortar y uno de los nombres más escuchados por estas horas es Sergio Ramos.
El defensor del Merengue, protagonista de la jugada que sacó de la definición a Mohamed Salah, estrella del Liverpool, también golpeó al arquero Loris Karius y las imágenes comenzaron a viralizarse en las redes sociales un día después del enfrentamiento.
Karius tuvo una noche para el olvido en Kiev, donde fue cómplice del primer y tercer gol del equipo de Zinedine Zidane. Muchos usuarios de las redes sociales acusaron a un culpable: Ramos, quien golpeó de manera innecesaria y hasta quizás malintencionada al arquero cuando el partido estaba igualado sin goles.
¿Mala intención o acción propia del juego?