Cuando todo indicaba que la recuperación de Enzo Pérez le permitiría a Marcelo Gallardo poner su once ideal en la final de la Copa Libertadores del próximo sábado ante Flamengo en Lima, en la práctica de este martes se abrió un interrogante por la inclusión de Paulo Díaz y River podría salir a la cancha con cinco defensores replicando el sistema táctico utilizado en la final del año pasado en la Bombonera y que tan buenos resultados le trajo.
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El Muñeco probó con línea de cinco con tres centrales, soltando de esa manera a Milton Casco y Gonzalo Montiel por los laterales. Lo sorprendente de esta prueba es que quien dejó su lugar para el ingreso del chileno fue Exequiel Palacios, pieza clave y titular inamovible en el último tiempo.
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Es casi una costumbre en Gallardo guardarse un as bajo la manga para sorprender al rival y no hay que descartar nada hasta último momento, aunque sea solo para desorientar a Jorge Jesús, el técnico portugués del Flamengo que llega de la mejor manera y demostrando un gran juego pero también deberá tomar sus recaudos ante un poderoso del continente como River.