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Cientos de miles de pedidos recibe el papa Francisco a diario de los fieles que lo visitan en plaza San Pedro. Sin embargo, una "autoridad importante de Brasil" fue más allá y lo desacomodó.
El brasileño, según aseguró el Papa entre risas, preocupado por la influencia del Sumo Pontífice en sus plegarias en favor de la Argentina en el Mundial le pidió "neutralidad" porque "la Copa es nuestra [de Brasil]".
Francisco sorprendido le preguntó: "¿Por qué?. La respuesta del brasileño fue tan elocuente como cierta: "Usted rezó por San Lorenzo que estaba abajo y salió campeón", señaló.
"No rece por la Argentina", le suplicó.
