Nicolás Cambiasso es uno de esos jugadores que hablan sin cassette. El arquero de All Boys habló sobre los barras y el problema de la violencia en el fútbol argentino, y sus palabras no dejaron lugar a dudas. "Estamos esperando que maten a uno", aseguró el hermano del Cuchu, que se refirió a los incidentes con Jonathan Bottinelli en San Lorenzo y Lucas Bernardi en Newell's.
"En Argentina le cortan un dedo a un colectivero y su sindicato para, en el fútbol esperamos que maten a uno", lanzó Cambiasso en una charla con el programa De Caño Vale Doble, que se emite por Radio Cooperativa. "Somos todos cómplices por miedo", agregó.
"Jugadores, periodistas, dirigentes, todo decimos que tiene que denunciar el otro porque todos en el fondo tenemos miedo", reconoció el arquero de All Boys.
"Un día lamentablemente uno morirá y nos preguntaremos porque no lo hicimos antes", siguió Cambiasso, para quien todo sigue igual porque "a mucha gente le conviene que la pelota siga rodando".
"El Estado es el que nos tiene que dar la seguridad", aseguró el hermano del Cuchu, que aclaró que se refería tanto al Gobierno Nacional como a las autoridades provinciales o municipales. "El problema del fútbol y la impunidad crece cuando el Estado empezó a usar a las barras como fuerza de choque político", concluyó.
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