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En el fútbol mundial en general, y el argentino en particular, ya casi nada sorprende. Todo parece permitido en pos de sacar algún tipo de ventaja.
La simulación, la deslealtad, el pedido de tarjeta y las entradas desmedidas que ponen en riesgo el físico del adversario son situaciones que ocurren prácticamente en todos los partidos de nuestro fútbol.
Pero la ocurrencia de Diego Ruiz, defensor de Claypole, supera lo imaginable. Por eso Nicolás Parodi, víctima de la "avivada", así lo explicó en Solo Ascenso: "Ser expulsado tan injustamente, por una viveza de mala leche que se ve claramente en el video, no le hago nada. El rival aplaudió y se tiró solo".
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