jueves 28 de marzo del 2024

Argentina-Brasil, en un estadio y una ciudad de lujo

El clásico sudamericano se juega en Jeddah, símbolo de la prosperidad que garantiza el petróleo en la península arábiga. Además, es una puerta de acceso principal a La Meca.

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Argentina y Brasil reeditan el gran clásico sudamericano en Jeddah, o Yeda, la segunda ciudad más importante de Arabia Saudita, situada en la costa oriental del Mar Rojo y punto de acceso clave a La Meca y Medina para los peregrinos musulmanes.

El estadio donde se disputará el partido, este martes desde las 14:45, es un icono de la riqueza y el lujo de esta ciudad saudí.

El King Abdullah Sports City Stadium, también conocido como The Shining Jewel (La Joya Brillante), fue estrenado en mayo de 2014 y lleva ese nombre en honor a Abdalá bin Abdulaziz, rey de Arabia Saudita desde 2005 hasta la fecha de su muerte, en enero de 2015.

Allí hacen de locales el All-Ittihad y Al-Alhi de la primera división del fútbol árabe. El primero de estos equipos fue dirigido por Ramón Díaz hasta hace un mes, cuando el riojano y su hijo Emiliano fueron despedidos por malos resultados. El segundo es comandado por el ex técnico de San Lorenzo, Pablo Guede.

Arabia Saudita es el principal exportador de petróleo mundial.Esa condición se traslada a los centros comerciales de Jeddah, sinónimo de élite y lujo. En la ciudad hay trece grandes malls que reúnen a marcas de primera línea como Lowe o Chanel.

Como ocurre con el resto de los países de la península arábiga, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos, por ejemplo, la explotación de los pozos petroleros promovió un repentino enriquecimiento financiero desprovisto de un desarrollo social equivalente.

El desajuste podría explicar la paradoja consumista: las mujeres no pueden exhibir en público la ropa o los accesorios que compran en esas tiendas de primer nivel.

La ley les permite elegir su vestimenta únicamente en situación de entrecasa, siempre y cuando se encuentren ante un familiar directo. En cualquier circunstancia que implique vida social son obligadas a vestir una túnica negra llamada abaya.

Este es uno de los tantos destratos a la mujer en una sociedad híperconservadora y patriarcal, que fundamenta su vida política en los mandamientos religiosos del islam.

De hecho, la prohibición de transitar al descubierto proviene de una cita del Coran: "«¡Profeta! Di a tus esposas e hijas y a las mujeres de los creyentes que se cubran desde arriba con sus vestidos. Esto es lo más adecuado para que se las reconozca y no se las ofenda. Alá es Perdonador, Compasivo".

AM.