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Dos bombas de estruendo que cayeron en el área de Cristian Lucchetti forzaron al árbitro Fernando Echenique a suspender a los 13 minutos de juego el partido en el que Banfield derrotaba a Estudiantes por 1 a 0 en el estadio de Quilmes.
El arquero del Taladro quedó aturdido luego de la explosión de las bombas por lo que el árbitro tomó la decisión final debido a que la policía no pudo garantizar la seguridad necesaria para continuar con el encuentro.
Mientras atendían a Lucchetti y Echenique dialogaba con los jefes del operativo policial, Juan Sebastián Verón le pidió a los hinchas que se bajaran del alambrado y les recriminó con algún insulto mediante la actitud de arrojar los proyectiles al campo de juego. Además del capitán pincha, Mauro Boselli y Gastón Fernández intentaron hablar con la gente de Estudiantes.
En cuanto al partido, poco había pasado hasta el gol de Hernán Rodrigo López, quien tras recibir un centro de Jonathan Gomez, definió suave para poner el primero del partido cuando el reloj marcaba nueve minutos.
