Quilmes consiguió un triunfo aliviador al imponerse 2-1 ante All Boys en el Estadio Centenario y a pesar de cortar una racha de nueve encuentros sin victorias, los Cerveceros continúan en zona de descenso.
Juan Manuel Cobo aclaró el partido para los locales desde el nacimiento con un golazo y Jacobo Mansilla aumentó la diferencia a los 16 minutos del segundo tiempo. Para los albos fue insuficiente el descuento que aportó Oscar Ahumada cerca del epílogo.
Quilmes tuvo un comienzo valorable, en el que tomó a All Boys mal parado. El anfitrión ya a los 2 minutos pudo haber abierto el marcador con un bombazo de Ernesto Goñi que Nicolás Cambiasso sacó por encima del travesaño.
Pero el tanto igual se concretó pronto, a los seis. La situación se originó en un lateral en posición de ataque que impulsó Goñi desde la izquierda y recibió Cobo, quien enganchó hacia adentro antes de disparar desde fuera del área grande para poner la pelota en el ángulo superior izquierdo.
Después de eso el equipo de Omar De Felippe se replegó especulando con ampliar la diferencia de contraataque, pero aùn así siguió siendo mucho más que el albo.
Los dirigidos por José Romero manejaron el balón con prolijidad y paciencia, pero sin penetración, por eso no complicaron al adversario y todo quedó limitado a pelotazos para los delanteros, Iván Borghello y Angel Vildozo.
En el segundo período, Quilmes continuó con su planteo calculador, aunque sin dejar de generarle preocupación al oponente mediante las réplicas.
En cambio, All Boys avanzó con su impotencia a cuestas, aunque hubo mejoras en el rendimiento a partir de los ingresos de Brian Sarmiento y, muy especialmente, del colombiano Santiago Montoya Muñoz. Vildozo y Borghello trataron de solucionar la falta de gol con remates desde fuera del área grande, pero la defensa del Cervecero estaba correctamente cerrada.
Desde el minuto 16, cuando Mansilla estableció el 2-0, el encuentro dio la impresión de que ya estaba controlado. En esa escena clave, hubo un contraataque en el que Fernando Elizari aplicó un centro pasado que capitalizó Mansilla.
Con todo, pudo haber descontado All Boys a los 25 por intermedio de Vildozo, a quien había habilitado Montoya Muñoz, pero un cierre oportuno de la defensa sureña solucionó el problema.
El descuento finalmente lo aportó el incansable Ahumada, desde el borde del área grande, pero no quedó tiempo para volver a alterar el marcador y Quilmes consumó un triunfo merecido.
Fuente: DyN