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El defensor Gabriel Milito se despidió anoche de los hinchas de Independiente en un partido homenaje que tuvo lugar en el Estadio Libertadores de América.
Hubo 30 mil espectadores y la recaudación será utilizada para fomentar el crecimiento de las divisiones inferiores, empezando por la reforma del predio que el club tiene en Villa Domínico.
Grandes figuras del fútbol argentino y la hinchada del Rojo le dieron color al evento, que consistió en un partido amistoso entre el equipo de Independiente que ganó el Torneo Apertura 2002 y los amigos de Milito.
Entre los primeros, dirigidos por Américo Gallego, estuvieron Lucas Pusineri, Federico Insúa, Pablo Guiñazú, Cristian Tula y Daniel Rolfi Montenegro, entre otros.
Y el conjunto de amigos fue un verdadero seleccionado bajo la conducción de José Pékerman, quien había sido entrenador de Milito en el equipo argentino que participó del Mundial de Alemania 2006. Si bien estuvo ausente Lionel Messi, el zaguero pudo darse el gusto de estar con Esteban Cambiasso, Juan Sebastián Verón, Diego Forlán, Andrés D'Alessandro, Javier Zanetti, Javier Mascherano, Gabriel Heinze, Maximiliano Rodríguez y su hermano, Diego Milito, entre otros.
El árbitro del encuentro fue Héctor La Coneja Baldassi.
En cada camiseta se inscribió la leyenda "El último Mariscal", haciendo referencia al mote que tuvo durante toda su carrera.
Con semejante marco, Milito tomó la palabra y dijo adiós a su manera: "Mi abuelo Antonio me traía a esta cancha todos los domingos desde que tuve un año y medio. Recuerdo que me pegaba a la fosa y miraba el partido desde esa altura, para sentirme más cerca. No le daba importancia a nada; solo al partido".
Milito, de 33 años, debutó en Primera División con la camiseta de Independiente en 1997, pasó por Real Zaragoza, el multicampeón Barcelona, y luego regresó a Avellaneda para culminar su carrera en el cuadro de sus amores.
"En Independiente formé parte del equipo campeón del 'Tolo' Gallego, que jugó tan bien, fue tan representativo... También tuve la suerte de vivir cosas muy lindas con la Selección y en otros clubes importantes, pero siento que este es mi lugar en el mundo", concluyó el 'Mariscal', emocionado.
Después del partido, Ricardo Bochini le entregó una plaqueta recordatoria y ambos se llevaron la ovación de la multitud.
Una de las sorpresas para el "Mariscal" fue un video que le prepararon algunos jugadores y ex compañeros suyos del Barcelona. Luego, también la familia de Milito grabó unas imágines recordando la trayectoria de Gaby y deseándole mucha suerte, emocionando entre lágrimas al "Mariscal".
Fuente: DyN
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