Del Potro: "Dejé hasta las uñas en la cancha"

Entró a la sala de conferencia con el mismo paso cansado con el que se movió por toda la cancha, pero con una sonrisa de oreja a oreja. Juan Martín Del Potro le ganó a su destino, que se empecinaba en decirle que lo suyo con el tenis ya era historia del pasado. Por eso disfrutó del que para él fue el mejor torneo de su vida. Porque no solo le ganó a Djokovic y Nadal para llegar a la final por la medalla de oro, en ese camino se volvió a encontrar con que el tenis y Juan Martín seguían teniendo muchas cosas en común.

Primero llegó el turno de analizar la final perdida ante Murray: "Es un gran campeón, muy inteligente para jugar, no puedo pedir más, fue más que un sueño. Fuimos dignos de una final olímpica. Dejamos todo adentro de la cancha. No me quedaba más energía. Muy cansado desde el primer set, las piernas no respondían. La gente me ayudó a sacar fuerza de donde no sabía que tenía. Me gustaría seguir demostrando y vivir estas emociones únicas más seguido”.

Una final que lo tuvo jugando con el corazón, porque el cuerpo ya le había dicho basta: "Me voy a mi país con una medalla y es increíble. También es increíble la forma en la que lo logré. Dejé hasta mi última uña en la cancha. ¿El cansancio? Tremendo el cansancio que tenía. Hasta estuve descompuesto en un momento del partido, con ganas de vomitar. Me sentía muy mal. No veía la pelota. En un momento empecé a gritar y me hizo mal, me empecé a marear. Pero terminar el partido de igual a igual al dos del mundo fue una gran satisfacción".

Ningún trofeo fue para Del Potro tan importante como la medalla plateada que no dejó de tocar un solo segundo durante la conferencia: "Tomé dimensión de lo importante que era ser olímpico una vez que lo hice. Después de haber vivido esta semana como se fue dando, en lo que va de mi carrera nunca viví algo tan lindo como lo que pasé estos días. Hacer cosas que un tenista no está acostumbrado. Y a nivel olímpico tener esto colgado acá es mucho más que un sueño".

El volver al día con el deporte que lo formó como deportista, pero sobre todo como persona, lo emociona más que nada: "El tenis es mi vida. He sufrido cuando no pude jugar y hoy el tenis me está haciendo feliz de nuevo. He pasado días maravillosos y todo esto se genera porque estoy jugando de nuevo al tenis. Extrañé mucho todo eso. Estuve al borde de no volver a vivirlas y ahora lo estoy haciendo de nuevo. Jugué siete partidos en una semana y hacía tres años que no podía hacerlo".

Andy Murray aseguró que "Del Potro puede volver tranquilamente al Top 5, porque lo que hizo esta semana venciendo a Nadal y a Djokovic demuestra que sigue teniendo un gran tenis". Sin embargo, para el tandilense todavía falta: "Me faltan muchas cosas. Una vez que esté sano tendré que ver para qué estoy".

Pero más que lograr las dos medallas a Del Potro lo que lo llenó fue la energía de la gente: "El cariño de la gente es muy difícil de lograr. Y no a muchos les pasa lo que me pasó a mi dentro de la cancha y vale lo mismo que esta medalla. Me voy satisfecho con ésta y Andy tiene muy merecida la de oro. Yo estaba muy conforme con la de bronce de Londres y ahora lo pude superar. Pero más allá de la medalla, no hay nada material que pueda igualar todo lo que viví esta semana. Fue un premio a todo el sacrificio que hice".

Ahora solo queda disfrutar. "Me quiero ir lo antes posible a mi país y poder ver más de cerca todo lo que se generó. Por lo que me han contado en mi ciudad se está viviendo como algo más grande que con el US Open. Trataré de no pensar en tenis por unos días".

(*) Enviado especial desde Río