El fútbol tiene un enorme componente mental y emocional y a eso apuntó Gimnasia con la contratación de Maradona y a eso también apunta Diego con sus jugadores pero cuando la mano viene torcida a veces no alcanza y cuando el Lobo igualó y soñaba con darle vuelta el partido a Racing para sumar sus primeros tres puntos en su lucha casi desesperada por engrosar el promedio, apenas 60 segundos después llegó el segundo de La Academia que cayó como un baldazo de agua fría.
Diego se dio el gusto de festejar su primer gol como entrenador de Gimnasia a los siete minutos del segundo tiempo gracias a un gran cabezazo de Matías García. Maradona lo gritó con alma y vida apretando sus puños, abrazándose con el cuerpo técnico y con los suplentes. Pero cuando todavía ni se había acomodado en el banco de suplentes, llegó la respuesta de Racing, tras un rebote Matías Zaracho apareció increíblemente solo y La Academia consiguió el 2-1, que sería el resultado definitivo. Y Maradona pasó de la euforia a la decepción en apenas un minuto.
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