Sergio Maravilla Martínez retuvo el título mundial mediano CMB al derrotar en falló unánime al inglés Martin Murray en un estadio de Vélez que estuvo repleto pese a la intensa lluvia que acompañó la jornada.
Todas las tarjetas vieron como ganador al campeón quilmeño por 115 a 112 y así, con mucho sufrimiento, Maravilla pudo quedarse con una pelea complicada, sobre todo a partir del octavo round, en el que Murray logró derribar a Martínez.
“Este campeonato es de todos ustedes, de todos los argentinos. Gracias por seguirme”, alcanzó a expresar Martínez abrazado a la bandera nacional luego de un arduo combate que tuvo un leve dominio del argentino.
La noche comenzó de la mejor manera para Maravilla. Alentado por una multitud que desafió al mal tiempo, al ritmo de Calle 13, el campeón llegó al ring con todo el entusiasmo y eso se vio reflejado en los primeros asaltos, donde Martínez acorraló a Murray, que se dedicó a esperar algún contragolpe, sin éxito.
La iniciativa de Martínez continuó al menos hasta el cuarto round, marcando con la derecha, pero sin poder meter esa zurda letal.
Murray fue animándose y abrió la guardia de Maravilla en el quinto y sexto asalto. La pelea se tornó pareja e intensa, acalorada por aliento incesante del público, que hostigaba al británico y animaba al argentino.
Luego de un golpe ilícito de Murray en el séptimo que pareció hacer reaccionar a Maravilla, el público volvió a alentar al quilmeño para que se despertara. Martínez ya tenía un corte en el pómulo izquierdo, pero siguió intentando acorralar a un visitante cada vez más sólido.
En el octavo llegó aquella derecha de Murray que tumbó a Martínez cuando retrocedía. A partir de allí creció el británico, se le animó a Martínez, que pudo contener el ímpetu del hasta esta noche invicto rival.
Y así fue que tras duros rounds, Martínez pudo equilibrar un poco la balanza en los últimos segundos de combate cuando volvió a tirar todos sus golpes que se fundían con el griterío de la hinchada.
El título quedó en la Argentina, tal como soñó Maravilla. No fue nocaut en el octavo como había vaticinado. Le costó muchísimo una pelea que hasta pudo haber estado más ajustada en los fallos, pero que terminó coronando al rey de los medianos.