La jornada dominical de la Superliga Argentina de Fútbol comenzó con una suspensión que generó polémica: tras varias inspecciones en el campo de juego, Facundo Tello postergó el duelo entre Gimnasia y Boca, que debía jugarse en La Plata.
Tras ver por primera vez el césped del estadio Juan Carmelo Zerillo en el Bosque, el árbitro declaró que estaban las condiciones dadas para que la pelota comience a rodar. Luego, en una segunda salida, Tello determinó suspender el encuentro y comenzaron las suspicacias.
"Pasó media hora entre que salí y volví a salir, se había acumulado mucha agua y pensamos que estábamos reglamentariamente para suspenderlo. Nadie me presionó y no sugirió nada, era totalmente libre para tomar la decisión con mi equipo, lo que hicieron ambos clubes es estar de acuerdo con mi decisión", expresó varias horas después Tello en diálogo con Fútbol 910 (radio La Red).
"No nos dejamos influenciar, nos quedamos para tratar de jugarlo; en la mitad de la cancha había mucha acumulación de agua. Por una decisión u otro hubiésemos recibidos opiniones encontradas", agregó el colegiado.
Luego, el árbitro que quedó en la mira ratificó su decisión en declaraciones a Gol de Vestuario: "Cuanto más pasa el tiempo, más me doy cuenta de que era la decisión correcta".
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