A pesar de toda la movida que realizó el gobierno para concretar la idea de Mauricio Macri de que la Superfinal por la Copa Libertadores entre Boca y River, el presidente finalmente reculó y le tiró la pelota a los clubes sobre la decisión final, que en principio estarían en contra de los visitantes.
"Le hemos ofrecido las condiciones para que jueguen con público visitante. A partir de ahí, es decisión de los clubes que son los que organizan el espectáculo. Lo importante es que si lo quieren hacer con público visitante, nosotros les damos las condiciones", señaló en una entrevista con Fox Sports Radio.
"Lo que quiero que quede claro, porque fui presidente de Boca durante 12 años, es que el que organiza el espectáculo es el club. Tiene la autonomía de hacerlo como la parezca. Estuvimos de acuerdo con el Jefe de Gobierno de la Ciudad y le garantizamos que si quieren jugar con público visitante, lo van a poder hacer. Pero a partir de ese momento, es decisión de los clubes. Estarán en estas horas debatiendo porque hace tiempo no lo hacen, ver qué es más conveniente", aclaró.
Macri se animó a analizar cuáles serán los factores que influirán en los directivos de Boca y River a la hora de definir si se juega con visitantes: "Esto fue una posibilidad más que hemos puesto sobre la mesa desde el Gobierno de la Ciudad con el apoyo nacional. No creo que los clubes tengan miedo en términos de seguridad, tendrán que ver organizativamente a partir de las restricciones con las que tienen armado el estadio".
"El otro problema que tienen hoy para este partido es con la demanda. ¿Calcularon cuánta gente querrá ir a la cancha? Debe ser un número gigantesco. También las limitaciones enormes desde ese lugar", agregó.
El Presidente confirmó que no irá a la cancha a ver los partidos porque agregaría una complicación más a los organismos de seguridad y destacó: "No sé en qué momento se entendió que un gobierno le va a imponer a un club de fútbol cómo organizar el espectáculo".
"Tenemos una enorme oportunidad de vivir una final histórica que no se va a repetir nunca más ida y vuelta porque la Copa Libertadores cambió. Esto tiene que ser realmente algo inolvidable y para eso tiene que ser impecable. Va a ser duro para el que le toque perder, pero tiene que entender que así es el deporte. Espero que todos sepamos aprovechar esto que ya se ha transformado en un evento mundial porque la potencia de Boca y River despertó el interés de todo el mundo", destacó.
Tras la aclaración de que los clubes tendrán la última palabra, Macri confesó por qué decidió hacer pública su oferta de garantizar la seguridad: "La propuesta fue que tengamos este partido como una fiesta completa y perfecta, más allá de que todavía no lo podemos hacer en todos los partidos que se juegan en Argentina".
ED