Desde aquella vez en 2015 cuando River eliminó a Boca de la Copa Libertadores en los escritorios de la Conmebol, Daniel Angelici repitió una de sus frases de cabecera: "Los partidos se ganan y se pierden adentro de la cancha".
Este mediodía, después de conocerse una nueva suspensión de la final de la Copa Libertadores, el máximo directivo Xeneize confirmó que el club envió a Conmebol un expediente con quince fojas. El objetivo: que decreten a su equipo ganador del partido que debió haberse jugado este fin de semana en el Monumental.
Ahí presentó un informe con lo ocurrido en la jornada del sábado, los informes médicos sobre las lesiones sufridas por los futbolistas y el pedido para que el organismo aplique las sanciones previstas en el artículo 18 de su estatuto.
La presión de los socios. Durante la mañana del domingo, las cuentas de Boca con mayor cantidad de seguidores impusieron el hashtag #AndateAngelici en las redes sociales.
La bronca surgió a raíz de la publicación del documento que habían firmado el sábado los dirigentes de Boca y River y Alejandro Domínguez, mandamás de la Conmebol. En el mismo se lee que el motivo de la suspensión del partido había sido "una piedra" que había impactado el micro de los jugadores visitantes. Para los hinchas, que Angelici hubiera avalado esa versión con su firma equivalía a una "entrega".
La palabra de Carlos Tevez y el pedido del resto de la dirigencia. Tevez dijo en los pasillos del Monumental que el partido no debía jugarse. Que, tal como ocurrió en la Boca en 2015, debía definirse en los escritorios.
La estrategia de corresponder estos episodios con lo ocurrido con el Panadero y el gas pimienta es, por estas horas, la estrategia discursiva de Boca.
Eso le manifestaron el resto de los dirigentes de Boca que integran la mesa chica del club a Angelici. El presidente hizo caso al pedido y les pidió a los abogados del club que redactaran el expediente. En horas de la madrugada se llevó a cabo esa tarea. Angelici recibió el borrador este domingo por la mañana. Tal como él reveló, estuvo trabajando personalmente en el documento, que más tarde envió por mail a las autoridades de Conmebol.