Esta noche en Asunción se espera un clima hostil para River como en las viejas Copas Libertadores donde el visitante además de preocuparse por el rival y todo lo referido al juego en sí la pasaba mal con todo lo que ocurría con lo extrafutbolístico, y que se corte el agua caliente del vestuario era lo más leve que podía ocurrir y a nadie lo sorprendía.
Lee también: Ordenan detener a Nicolás De La Cruz en Paraguay
Todo comenzó a enrarecerse este miércoles cuando la Policía de Paraguay fue a buscar al uruguayo Nicolás De la Cruz al hotel por un incidente ocurrido en 2016 cuando el hoy futbolista de River golpeó a un oficial en plena trifulca entre su equipo el Liverpool y el San Pablo de Brasil en la final de la Copa Libertadores Sub 20.
Los hinchas, los jugadores y los dirigentes de Cerro Porteño quedaron muy molestos con el arbitraje en el Monumental y de alguna manera intentan sacar de eje a la delegación argentina con pequeñas actitudes que poco tienen que ver con el fútbol.
Lee también: Un anunciante de Cerro Porteño chicaneó a River
Ya en la noche previa al partido, sonaron petardos a altas horas de la madrugada para interrumpir el sueño de los jugadores. Y en la previa del duelo revancha de cuartos de final, los dirigentes visitantes recibieron pulseras azules y amarillas para ingresar al "Sector B" de plateas y también el vestuario visitante tiene esa denominación chicaneando al Millonario por el descenso de 2011, ya que según periodistas que trabajan en Asunción esa inscripción no existía anteriormente.
IP