Lionel Messi fue la gran figura del triunfo del Barcelona ante Napoli por los octavos de final de la UEFA Champions League. El argentino convirtió el segundo gol del equipo Blaugrana y provocó el penal que derivó en el tercero, autoría del uruguayo Luis Suárez.
El defensor senegalés Kalidou Koulibaly le propinó una terrible patada al capitán del Barcelona. Messi se interpuso en el momento exacto en que el futbolista de 29 años iba a rechazar dentro de su propia área.
El argentino estuvo largo rato tendido en el piso. El árbitro turco Cüneyt Cakir fue al VAR y sancionó penal. Messi no pudo hacerse cargo de la ejecución. Le cedió la pelota a Suárez. El remate del uruguayo dejó sin chances al colombiano David Ospina. Fue el 3 a 1 del equipo local.
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AM
