La Ligue 1 francesa no había sacudido tanto el mercado de fichajes desde 2017, con la llegada de Neymar y Mbappé al PSG. Pero la edición de 2021 del 'mercato' quedará marcada por el equipo parisino pase lo que pase.
La contratación de Messi, a quien el FC Barcelona no pudo conservar, provocó una repercusión inédita en la capital francesa. Tanto en el Parque de los Príncipes durante su presentación, como en sus primeros minutos de juego el domingo en Reims, la 'Pulga' desató las pasiones entre los aficionados.
Su impacto ha sido tanto que casi hace olvidar el resto de fichajes. Sergio Ramos, Georginio Wijnaldum y Gianluigi Donnarumma llegaron gratis y por Achraf Hakimi el PSG pagó 60 millones de euros al Inter de Milán.
Mientras tanto, el culebrón Mbappé continúa. Nada parece convencer al PSG de vender a su superestrella, al menos de momento. La primera oferta de 160 millones de euros "no (fue) suficiente", según el director deportivo Leonardo, y la segunda propuesta de 180 millones de euros, bonificaciones incluidas, que evoca la prensa, aún no tiene respuesta.
La Premier League, la que más gasta
La crisis del covid-19 no ha cambiado los hábitos: el campeonato inglés sigue siendo el que más gasta, al apuntarse siete de los diez fichajes más caros del verano.
El Manchester City realizó la contratación más alta. El centrocampista ofensivo del Aston Villa y nuevo ojito derecho de los hinchas ingleses, Jack Grealish, pasó a vestir de azul celeste a cambio de 117 millones de euros (138 millones de dólares).
El Chelsea, vigente campeón de Europa, gastó 115 millones de euros (135 millones de dólares) en Romelu Lukaku (Inter de Milán).
Pero quizás fue el United quien más llamó la atención al conseguir el regreso de Ronaldo, su antigua estrella. También se hicieron con Jadon Sancho (Borussia Dortmund, 85 millones de euros) y Raphaël Varane (Real Madrid, 40 millones de euros).