Sergio Ramos, campeón del mundo en 2010, avisó que quiere devolver la "confianza" depositada desde París Saint Germain en el último mercado de pases, en el que arribó libre desde Real Madrid y aún no debutó por diferentes lesiones.
"Creí en mí y en el trabajo. Me concentro sobre el hecho de devolver al club la confianza que ha depositado en mí. Espero alcanzar mi mejor nivel", comentó el excapitán de Sevilla de España en una nota con Amazon Prime Video que se difundirá este domingo. "Al final son momentos difíciles, momentos de soledad. Horas enteras en el gimnasio con el fisioterapeuta, con el preparador físico", explicó.
Ramos, de 35 años, recién ocupó un lugar en el banco de suplentes en la caída de entres emana con Manchester City (2-1) por la Liga de Campeones y podría debutar en los compromisos venideros del PSG de Lionel Messi, Neymar y Kylian Mbappé.
"Creo que puedo seguir jugando todavía cuatro o cinco años. Lo más importante es que la cabeza aguante. Espero no tener más problemas físicos", sostuvo el defensa, con contrato con los parisinos hasta junio de 2023.
