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Minutos antes de que Neymar y compañía vencieran a Croacia, el joven cuadripléjico apareció con un traje llamado exoskeleton, formado por una armadura robótica, que le permite a un discapacitado volver a caminar controlando el traje a través del cerebro.
El accidente de tránsito que afectó su médula lo dejó parapléjico, sin embargo esta tarde fue inolvidable para Juliano Pinto, de 29 años, ya que, pese a su capacidad limitada, dio el puntapié inicial de la ceremonia inaugural del Mundial gracias al increíble desarrollo de la neurociencia.
El emocionante acontecimiento se propuso mostrar cómo la unión entre la neurociencia y las máquinas podrá trazar un nuevo futuro para las personas que perdieron su movilidad.
El neurocientista brasileño Miguel Nicolelis reunió un equipo de 156 personas especializadas de 25 nacionalidades. El proyecto bautizado "Andar de nuevo" recibió un apoyo financiero de 33 millones de reales del gobierno brasileño.
