El anuncio de la confirmación de la final de la Copa Libertadores trajo consigo dos noticias para River: la sanción por la agresión al micro de Boca y la apelación de los dirigentes millonarios para que el partido no se juegue en Madrid y se haga en el estadio Monumental.
La Unidad Disciplinaria de Conmebol sancionará a River por los episodios violentos: jugará dos partidos internacionales a puertas cerradas en el Monumental el próximo año y 400 mil dólares de multa.
En las últimas horas, River comunicó oficialmente presentará un reclamo legal en rechazo por la designación del estadio Santiago Bernabeu, de Madrid, como sede y por las sanciones recibidas.
"El Club Atlético River Plate informa que realizará los planteos legales y las apelaciones pertinentes en relación con lo resuelto en el día de la fecha por la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) y por su Tribunal de Disciplina, en relación al cambio de sede dispuesto sobre el partido final de la Copa Libertadores 2018, la sanción económica y la prohibición de disputar con público dos partidos oficiales organizados por CONMEBOL", dice el comunicado publicado en la página oficial de River.
FH