Miguel Galíndez fue el masajista de la Selección argentina durante el reinado de Diego Armando Maradona. Fue, según los campeones del 86, uno más del célebre ciclo de Carlos Salvador Bilardo. También estuvo junto a Alfio Basile en Estados Unidos 1994.
Galíndez es un allegado a la familia Maradona, a tal punto que Claudia Villafañe le blanqueó el acceso a la despedida privada que íntimos y allegados le ofrecieron a Pelusa antes del inicio del multitudinario velorio. No es para menos: fue, incluso, una especie de 'niñera' de Dalma y Gianinna.
En diálogo con el programa radial Súper Deportivo Radio, por Radio Villa Trinidad, Galíndez narró cómo fue la experiencia de despedir al ídolo, a su amigo, a ese que asistió durante más de una década en cada vestuario que estuviera Diego.
"En el velorio, lo primero que hice fui a tocarle el tobillo, la rodilla y el gemelo. Lo acariciaba. Le dije que siempre iba a estar con él. Cuando lo ví a Diego ayer en el cajón, me di cuenta que lo destruyeron", dijo Gali en un sentido diálogo radial.
El histórico masajista de la Selección cuestionó duramente al último entorno de Maradona: "Diego confiaba tanto en mí, que me decía: 'Galindez toma esta plata cuídamela', en Barcelona e Italia. Jamás toque un peso de Diego. En cambio todo el entorno que estuvo al lado de Diego son una manga de tránsfugas, vividores, traidores hijos de mil puta. Tantos abogadores y traidores y así se lo llevaron a Diego. Murió solo".
"La gente que estaba alrededor debe estar contenta. Ahora se van a matar. Todos esos delincuentes, el abogado y toda esa mierda que estaba ahí. Nunca nos pudimos acercar a hablar con él. Le mandaba un mensaje a Diego y nunca tenía respuestas. Estábamos totalmente aislados del mundo Diego", agregó.
En el velorio, Galindez se reencontró con los campeones del 86, entre estos Oscar Ruggeri, con quien también mantiene un vínculo de cariño y amistad: "Fue muy fuerte verlo a Diego, muerto. Oscar me decía 'mira como se ríe'. Lo vi descansando en paz".
AM