A Óscar Córdoba le alcanzaron menos de 200 partidos en Boca para que al menos su nombre aparezca en en cualquier encuesta que busque al mejor arquero de la historia del club junto a otras leyendas como por ejemplo Hugo Orlando Gatti y Carlos Fernando Navarro Montoya y no es para menos con todo lo que ganó entre 1997 y 2001, con dos Copa Libertadores y una Intercontinental incluidas y en una entrevista con el ya clásico Líbero Vs de TyC Sports recordó varias perlitas de esa época dorada pero lo más divertido fue cuando sin querer mandó al frente a Guillermo Barros Schelotto.
"Un compañero que te sorprendía lo que corría a pesar de lo que fumaba", era la consigna Matias Pelliccioni cuando el colombiano respondió sin pensar demasiado: "Guille, Cagna... O era Gustavo, borralo. No me acuerdo, de pronto me lo estoy confundiendo con otro", la quiso arreglar cuando el periodista le recordó el conflicto que tuvo el Mellizo como DT con Daniel Osvaldo justamente por un cigarrillo, que desencadenó en la salida del club e incluso el retiro del delantero.
Pero más allá de esto, el ex arquero contó otras grandes historias sobre su llegada a Boca, el hincha que lo insultaba todos los partidos por cábala y los duelos con José Luis Chilavert, contó qué le dijo Carlos Bianchi antes de la definición por penales ante Palmeiras en la final de la Libertadores, llenó de elogios a Marcelo Gallardo y confesó un día quedó maravillado con la hinchada de River.
Por otro lado, aseguró que se llevaba muy bien tanto con Martín Palermo como con Juan Román Riquelme y agradeció el trato que le dio el grupo a él y a sus compatriotas para hacerles más sencilla la adaptación. Y además recordó una anécdota de sus primeros días en Boca donde compartió plantel con Diego Maradona: "Llega al entrenamiento en una Ferrari Testarossa, hace un par de trompos en una esquina, la estaciona y yo me quedo mirándola porque nunca había visto una. Y me dice 'che Córdoba llevátela'. Y yo pensé 'llegó a dañar una llanta y me toca jugar gratis en Boca toda la vida'".